Las demandas de recursos a rubros como campo, educación e infraestructura han desbordado la capacidad de la Cámara de Diputados para asignar más fondos en 2020, expuso el presidente de la Comisión de Presupuesto, Alfonso Ramírez Cuéllar (Morena).

Por ejemplo, dijo, se debe cumplir la obligatoriedad de la educación superior y el rescate de las escuelas normales, como se definió en la legislación reglamentaria de la reforma al artículo tercero constitucional, así como financiar la operación de la nueva estructura prevista en la reforma laboral. Las exigencias de presupuesto son fuertes, dijo.

Una vez recibida la minuta del Senado con ingresos y miscelánea fiscal, la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados sesionará mañana martes para analizar el documento, aunque los diputados reconocen que los cambios de los senadores no modifican la carátula de la Ley de Ingresos.

La Cámara tiene hasta el miércoles para aprobar la Ley de Ingresos de la Federación, para iniciar la discusión del presupuesto, que debe votarse a más tardar el 15 de noviembre.

Ayer, tanto Ramírez Cuéllar como la vicepresidenta de la Cámara, Dolores Padierna Luna, lamentaron por separado que la presión de las grandes empresas no permitió un aumento del IEPS a bebidas azucaradas, cigarros y comida chatarra.

La legisladora refirió que la cuota del IEPS a ese tipo de bebidas se actualizó en enero de 2018, conforme a las disposiciones del Código Fiscal de la Federación y para 2020, la Secretaría de Hacienda propuso un ajuste conforme a la inflación.

En el caso del tabaco, dijo, se aplican dos IEPS: una tasa de 160 por ciento al valor de las ventas y una cuota adicional de 35 centavos por cigarro.

Esta última se definió en enero de 2011 y no se ha modificado, lo que implica que ha disminuido en términos reales y, como en las bebidas endulzadas, Hacienda propuso actualizar la cuota conforme a la inflación.

Padierna Luna dijo que no sólo se debe analizar el aumento en la cuota, sino su efecto. Refirió que entre 2014 y 2015, el consumo por habitante bajó y repuntó en 2016 y se mantuvo durante 2017 y 2018. Probablemente este comportamiento fue influido por la desactualización del IEPS, dijo.

Una tendencia similar ocurrió con cigarros: el consumo per cápita aumentó en 2015 y 2016, también probablemente por la desactualización del IEPS y en 2017 y 2018 se mantuvo sin cambio, señaló.

Ramírez Cuéllar expresó que el Congreso “perdió la oportunidad de aprobar una actualización objetiva de IEPS a tabaco, alcohol y a todos los productos chatarra”.

El cálculo de recaudación adicional era de 40 mil millones de pesos, destinados “a atender a cientos de miles con diabetes, cáncer, obesidad, enfermedades cardiovasculares y a fortalecer los sistemas de salud para atender esta epidemia sanitaria.

La presión fue muy intensa de los cabilderos, al igual que en los derechos de agua. Son grandes grupos los que se ven afectados y es una lucha que hay que continuar, dijo.