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Un referente deportivo: Guevara

Emotivo adiós para Queta, protagonista de la historia
 
Periódico La Jornada
Lunes 28 de octubre de 2019, p. 5

Medallistas y deportistas de distintas generaciones, directivos y amigos dieron el último adiós a Norma Enriqueta Basilio Sotelo, en un funeral donde los recuerdos brotaron entre un cúmulo de sentimientos para recordar a quien fuera la primera mujer en encender un pebetero olímpico, en la justa de México 68.

“Quién no quería a Queta”, era el comentario más escuchado de los asistentes que hacían fila para dar las condolencias a los hijos de la bajacaliforniana, rodeada de flores y varias fotos que forman parte del historial que acumuló por más de medio siglo y atesoró en su casa con las paredes forradas de medallas, diplomas, reconocimientos nacionales y en el extranjero, libros, pinturas, con ese amor del olimpismo que la caracterizaba.

Eres y serás parte importante de la historia deportiva de nuestro país, referente emblemático del papel de la mujer, expresó Ana Guevara, directora general de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte, en redes sociales, y compartió una foto con ella y la antorcha olímpica que portó la Gacela de Mexicali, que ayer fue cremada.

En el velorio estuvo una pequeña parte de la delegación del 68, que fue la más notable por ganar el mayor número de medallas en una justa olímpica, marca que no ha sido superada: nueve en total con tres oros, tres platas y tres bronces.

Felipe Muñoz, el campeón olímpico de natación, prefiere recordarla con alegría después de que Queta enfrentó durante 20 años el mal de Parkinson, que se le complicó con otras afecciones, igual era el sentir de sus compañeros de atletismo, la mayoría de la UNAM o del maratonista de Xochimilco, Pablo Garrido, quien hizo el juramento deportivo de esa gesta deportiva que ayer cumplió 51 años de la ceremonia de clausura.

Daniel Aceves, submonarca en Los Ángeles 84, y Jimena Saldaña, vicepresidenta del Comité Olímpico Mexicano, resumían la generosidad y humanidad de una mujer que abrió las puertas en todos los sectores. Anunciaron que se le harían homenajes póstumos si eran autorizados por su hijos Mario, Oliver y Quetita, quienes recibían abrazos de sus compañeros ex seleccionados de volibol y waterpolo.