Para sacar del letargo la actividad económica, el gobierno federal planteó una estrategia en la que intervienen los sectores público y privado –anunciada el 29 de julio–, y que involucra 485 mil millones de pesos. Estos recursos comprenden los destinados a infraestructura pública y apoyos para impulsar el consumo de empresas y familias, según informó en su momento la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.

Una parte de ese programa es la licitación anticipada de infraestructura, como la anunciada este jueves por las secretarías de Hacienda y Comunicaciones y Transportes.

Las obras más representativas al amparo de este programa tienen que ver con la conservación periódica de tramos carreteros, y conservación y reconstrucción de puentes.

De acuerdo con Hacienda, se espera que las empresas que se hagan con las licitaciones comiencen a invertir en recursos materiales y humanos a partir de este mismo año. Así, el impacto económico de acciones recurrentes programadas para 2020 se podrá detonar desde 2019.

Con este tipo de acciones el gobierno busca impulsar, con la iniciativa privada, al sector de la construcción, uno de los principales motores de la economía que se encuentra correlacionado con alrededor de 60 ramas de la actividad económica en todo el país.