En el Día de Acción Global por la Despenalización del Aborto, activistas feministas marcharon desde el Monumento a la Madre al Zócalo, en demanda de que en todo el país se garantice el aborto seguro, gratuito y legal.

Aunque reconocieron que la reciente aprobación en Oaxaca constituye un avance, no es suficiente que sólo en dos entidades del país (Ciudad de México y Oaxaca) se pueda ejercer ese derecho.

A las 17 horas el contingente comenzó a avanzar por Paseo de la Reforma al grito ¡Arriba el feminismo que va a vencer, que va a vencer!, ¡Los asesinos son ustedes, en el aborto clandestino las que mueren son mujeres! y ¡Aborto legal para no morir!

La mayoría de las manifestantes, vestidas de negro y cargando los característicos pañuelos verdes, marcharon de forma pacífica y enfocadas en la movilización, pero un grupo de mujeres con el rostro cubierto con pañuelos, telas negras y máscaras blancas, comenzó a hacer pintas en las aceras, el arroyo ve­hicular, en las paradas del Metrobús ­–en algunas destrozaron los vidrios– y en las estatuas que flanquean la avenida.

Iban provistas de grandes pistolas lanza agua, rellenas de pintura y algún material combustible, pintura en aerosol y algunas cargaban paralizadores eléctricos que activaban reiteradamente, pero sin usarlos contra alguna persona, y otras –muy pocas– cargaban martillos para romper cristales.

Custodiaron la protesta elementos femeninos de la policía capitalina, las cuales apagaron el fuego que las encapuchadas y enmascaradas prendieron en una de las puertas de la Cámara Nacional de Comercio de la Ciudad de México. Atizaron el fuego con los líquidos flamables, pero las policías las sofocaron con extintores manuales.

Algunas versiones señalaron que se utilizaron gases lacrimógenos, lo cual desmintió la policía.

El otro incidente fue a las afueras de la Catedral Metropolitana donde las manifestantes de rostro cubierto subieron a las rejas que delimitan el atrio y pintaron algunas de las columnas e intentaron prender fuego. La policía otra vez intervino con los extintores manuales, y se creó un conato de enfrentamiento que no pasó a mayores.

Las manifestantes corrieron hacia Palacio Nacional y tras ellas las policías. Algunas lograron hacer pintas en las paredes del inmueble, e incluso algunos ciudadanos intentaron evitar que las rayaran. En los muros quedó escrito Será ley, Aborto legal, Asesinos y Violadores. Los militares que custodian la puerta mariana filmaban cuanto ocurría.

El contingente mayoritario llegó a la explanada, donde celebró un mitin. Allí se subrayó que la Marea Verde está inundando la Ciudad de México y todo el país y el reclamo de cese de la violencia hacia las mujeres fue tema en los discursos.

La madre de María de Jesús Jaimes Zamudio, víctima de feminicidio, criticó la protección que se da a los feminicidas y señaló: Cómo me hubiese gustado que mi hija se hubiera llamado pared, porque la habrían protegido.

Otra activista también se refirió a la insignificancia que tiene un destrozo, una pinta o una quema, en relación con el valor de la vida de una mujer. Si tenemos que quemar Palacio Nacional, lo vamos a quemar, sostuvo ante el respaldo generalizado.

Por la mañana integrantes de Marea Verde grabaron un video en la avenida Madero, ante la iglesia de San Francisco y el Templo Expiatorio Nacional de San Felipe de Jesús.

Allí acudieron integrantes de grupos católicos y defensores de la vida, los que se plantaron frente a esas sedes para evitar que ocurriera un sacrilegio.

Mientras las mujeres participaban en la grabación, los antiabortistas, portando pañuelos celestes, y con Rosarios en mano, rezaban el avemaría, gritaban vivas a Cristo Rey y ¡Vida sí, aborto no!

En tanto, las integrantes de la Marea Verde cantaban Arriba el feminismo que va a vencer, que va a vencer; abajo el patriarcado, que va a caer, que va a caer y Hay que abortar, hay que abortar, este sistema patriarcal.

En la marcha algunos hombres fueron agredidos por las encapuchadas, les pintaron el rostro con aerosol. Un hombre de 62 años fue atendido por el Escuadrón de Rescate y Urgencias Médica porque le entró pintura en un ojo.

En el mitin insistieron en que si nosotras parimos, nosotras decidimos y advirtieron que somos malas y podemos ser peores.