Ya no hay motivos para dilatar más el envío de los restos óseos localizados en el basurero de Cocula, Guerrero, para que sean analizados e identificados en el laboratorio especializado de la Universidad de Innsbruck, señaló el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez.

Para el ombudsman, el organismo a su cargo ha insistido al gobierno federal para que esos restos se analicen y con ello dar certeza a las familias de los 43 estudiantes de Ayotzinapa y a decenas de familias con personas desaparecidas en el país, planteó ayer luego de inaugurar el Foro nacional verdad, redes sociales y derechos humanos.

Recordó que las autoridades federales dijeron que no habría restricción presupuestal para conocer la verdad. Además, señaló, en el pasado justificó la decisión de no enviar los restos a analizar por los tiempos de la averiguación previa, pero ahora ya no hay tiempo que justifique dilatarnos más. México se encuentra en un estado de derecho débil porque hay total impunidad y falta de justicia, además de que los índices delictivos van al alza, consideró.

Sobre la investigación que refiere a Tomás Zerón y otros funcionarios señalados por la CNDH en el caso Ayotzinapa, pidió a las autoridades federales hacer caso de las recomendaciones que esa institución hizo para castigar a los responsables.

En el país tenemos un problema, efectivamente, de violencia e inseguridad, corrupción e impunidad, por lo que es importante que se fortalezca no una sola Fiscalía General, sino que necesitamos 33 autónomas y policías eficientes, advirtió.