Arizona, Texas y Nuevo México, estados gobernados por republicanos, se comprometieron a enviar cerca de mil 600 efectivos de la Guardia Nacional a la frontera con México, en respuesta al plan de Donald Trump de usar a las fuerzas armadas para combatir la migración y el narcotráfico.

Ayer, el gobierno de Arizona desplegó los primeros 225 efectivos. En tanto, el gobernador de Texas, Greg Abbot, dijo que añadiría cerca de 300 soldados por semana hasta llegar a mil.

La Guardia proveerá soporte aéreo, de reconocimiento, apoyo operacional, infraestructura de fronteras y apoyo logístico, se precisó en un comunicado.

En tanto, el gobernador de Arizona, Doug Ducey, en su cuenta de Twitter dijo que ayer serían desplegados 225 soldados y hoy 113 adicionales.

Tenemos que aliarnos con agencias a escala local, estatal y federal para hacer lo que Washington no pudo por mucho tiempo, asegurar nuestra frontera sur, expresó Ducey en un saludo a las tropas. Sus esfuerzos ayudarán a que Arizona y nuestro país estén más seguros, indicó.

California, sin notificar

Por otro lado, en la oficina de la gobernadora de Nuevo México, Susana Martínez, se dijo que más de 80 elementos serían enviados los próximos días. Serán los primeros de un contingente que se prevé estará formado por 250 miembros de la Guardia Nacional.

En tanto, California, gobernado por el demócrata Jerry Brown, no ha hecho un compromiso público de enviar efectivos. Esperamos más detalles sobre financiamiento, duración de la misión y su final, dijo la semana pasada el coronel Tom Keegan, portavoz del componente en California, que cuenta con 250 efectivos desplegados en un plan antidrogas, de los cuales 55 apoyan en la frontera sur.

La semana pasada Trump señaló que desea enviar entre 2 mil y 4 mil integrantes de la Guardia Nacional a la frontera. Además, probablemente se mantendrían allí hasta que sea construido el muro que propuso para detener el flujo de migrantes y drogas.

La decisión fue anunciada después de su rechazo a una caravana de migrantes centroamericanos en territorio mexicano que se proponía llegar a la frontera con Estados Unidos.

Apenas el domingo efectivos de la Guardia Nacional estuvieron en las instalaciones de la patrulla fronteriza, en la entrada internacional de Santa Teresa, Nuevo México, a unos 25 kilómetros de Ciudad Juárez.

La fuerzas federales estadunidenses crearán más vulnerabilidad entre los menores migrantes no acompañados, afirmó el gobierno de Sonora. No obstante, dijo que la relación entre Arizona y la entidad mexicana continuará firme en salud, educación, economía y turismo.

En ese contexto, medio centenar de militantes de Morena en Ciudad Juárez, Chihuahua, se plantaron frente al consulado de Estados Unidos para expresar que es evidente que militarizar la frontera resulta absurdo, costos y es una muestra de mala vecindad e innecesaria.

(Afp y Ap, con información de Rubén Villalpando y Cristina Gómez Lima, corresponsales)