Lunes 9 de abril de 2018, p. 33
La petrolera Shell, que ya abrió en México sus primeras gasolinerías, enfrentará una demanda judicial en los Países Bajos para que deje de generar emisiones de gases de efecto invernadero (GEI), causantes del cambio climático, pues se ubica entre las 10 empresas más contaminantes del planeta, anunció la organización Amigos de la Tierra Países Bajos.
Informó que llevará a Shell a la justicia si hace caso omiso de los reclamos de que frene la destrucción que causa. Según Donald Pols, director de ese organización, la petrolera desde hace más de 30 años sabe que provoca un peligroso cambio climático, pero sigue con la extracción de petróleo y gas, e invierte miles de millones de dólares en la búsqueda y desarrollo de nuevos combustibles fósiles
.
Karin Nansen, presidenta de Amigos de la Tierra Internacional, en un comunicado explicó que este caso es importante para todo el mundo. Shell causa enormes daños a escala mundial. Con esta demanda tenemos la oportunidad de que rinda cuentas
. Shell es una empresa con sede en La Haya, que ha ofrecido respetar los Acuerdos de París, pero emite el doble de las emisiones de GEI de los Países Bajos, señala la organización.
En NY pidieron indemnizaciones
Ya en enero pasado en Nueva York se pidió la indemnización de las cinco principales empresas petroleras, entre ellas Shell, por las consecuencias del cambio climático. Las ciudades de San Francisco y Oakland, así como varios condados de California también lo han hecho.
El caso de Amigos de la Tierra Países Bajos es parte de un movimiento mundial para hacer que las empresas rindan cuentas por su responsabilidad respecto del cambio climático. La organización explicó que la demanda que se presentará en los próximos días es única, pues es la primera de carácter judicial que exige que una empresa de combustibles fósiles haga algo en materia del cambio climático, en lugar de exigir indemnización.
La demanda es apoyada por Amigos de la Tierra Internacional, que realiza campañas por la justicia climática para los pueblos del mundo afectados por la energía sucia y el cambio climático, y tiene presencia en 75 países.
La organización consideró que con esta acción judicial pionera, en caso de ser favorable para la organización, se limitaría significativamente las inversiones de Shell en petróleo y gas a nivel mundial, obligándola a cumplir metas climáticas.