El Instituto Mexicano del Petróleo (IMP) arrancará formalmente en mayo las operaciones del Centro de Tecnología en Aguas Profundas, un laboratorio por conducto del cual el Estado mexicano venderá productos y ofrecerá servicios a las empresas nacionales y extranjeras que han ganado licitaciones petroleras.

Este centro es una respuesta que normalmente no se da en otras partes del mundo para decirles: no solamente generamos bloques competitivos, sino estamos dando un instrumento técnico con el cual van a tener mejor información para reducir el costo y el tiempo entre descubrimiento y primera producción, señaló en entrevista el director del IMP, Ernesto Ríos Patrón.

Aseguró que la responsabilidad de ofrecer servicios a las compañías privadas no es sólo de la administración pública o de las empresas.

Se vuelve un tema de todos los técnicos mexicanos en su conjunto que entendamos que una vez que (dichas empresas) hacen la apuesta en el país es nuestra responsabilidad darles condiciones para que eso se monetice suficientemente rápido en beneficio del Estado y de las empresas.

Entrevistado durante su participación en un foro energético, el funcionario detalló que aunque todavía está en proceso de pruebas, el centro se encuentra prácticamente terminado en lo que se refiere a su construcción e instalación de los equipos, en el momento en el que se están comprometiendo las inversiones que han generado las rondas petroleras.

Detalló que ya se empieza a trabajar en seis proyectos de investigación por un monto aproximado de 425 millones de pesos.

Nosotros hablamos de laboratorios, pero son laboratorios de carácter semiindustrial, de gran dimensión, que tienen equipos que existen en muy pocas partes del mundo. Un ejemplo es lo que nosotros le llamamos lub de alta presión, que es una estructura industrial que simula las condiciones de yacimientos en presión y temperatura a nivel de aguas profundas, explicó.

Con ese laboratorio las empresas nacionales y extranjeras van a poder valorar equipos de medición, configuraciones para la explotación y tendrán información para el diseño de la infraestructura de perforación de pozos, indicó el directivo.

Ríos Patrón dijo que el financiamiento del centro provino la mitad del IMP, concretamente la ingeniería y la construcción por un monto de mil millones de pesos, y el resto por el fondo Sener-Conacyt-Hidrocarburos, de donde se obtuvo todo el equi- pamiento y el financiamiento de los proyectos de arranque.

El IMP es una entidad federal que no recibe presupuesto. La mayoría de los ingresos los generamos porque vendemos servicios técnicos de exploración, de producción, de ingeniería o de capacitación. Por otro lado, hacemos investigación y desarrollo tecnológico financiados por recursos fiscales que provienen del Fondo Mexicano del Petróleo, por lo cual el centro fue concebido para ambas actividades.

El director del IMP señaló que el tiempo de recuperación de la inversión será muy rápido.

Lo que sí le puedo decir es que una vez que empiecen a utilizar cerca de la mitad de los servicios que tenemos diseñados la recuperación se puede hacer fácil en dos años. Tan sólo imagine, un buen diseño en la parte de perforación y segmentación de pozos te ahorra muchísimo dinero, porque no es lo mismo poner el cemento a nivel de suelo que tener todavía que llevar todo ese cemento hasta abajo en el subsuelo, comentó.