La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) llamó a las autoridades a no abandonar a los más de 12 millones de mexicanos que viven en Estados Unidos, ya que este año será crucial en la defensa de la comunidad migrante, considerando que en 2017 este sector fue víctima de discursos de odio y acciones de discriminación y racismo.

En un comunicado, el organismo consideró necesario replantear la política migratoria del país, para que vaya más allá de la contención de flujos migratorios y esté revestida de visión humanística, en la que el eje central sea el respeto de los derechos humanos.

Asimismo, la CNDH subrayó que quienes se encuentran en ese contexto antes que migrantes son personas a las que se debe brindar protección y condiciones para el ejercicio de sus derechos, incluidas las que deciden o se ven obligadas por distintas circunstancias a hacer de México su destino final.

Luego de manifestar su respeto por la labor que hacen los albergues y casas del migrante en apoyo del sector, el organismo hizo un recuento de las actividades de su titular, Luis Raúl González Pérez, en 2017, entre ellas su participación en diversos foros y visitas de trabajo en Estados Unidos, donde analizó las condiciones de vida de los mexicanos en aquel país.

El ombudsman nacional también solicitó medidas cautelares promovidas ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para evitar que las personas migrantes sean detenidas, mexicanas o no, y en caso de suceder así, que sean tratadas dignamente y sin estar sujetas a ninguna clase de criminalización.

Además, exhortó al Congreso de Estados Unidos a otorgar una solución definitiva en favor de los llamados dreamers.