Autorizar la cuenta pública del año pasado, entre los temas
Sábado 29 de abril de 2017, p. 10
Este sábado se realizará la primera sesión del consejo nacional del PAN, electo entre diciembre y enero pasados, con el fin de aprobar el presupuesto 2017, la cuenta pública del año pasado y la integración de sus comisiones.
Entre quienes forman parte del órgano colegiado se encuentran los diputados Marko Cortés y Federico Döring; el ex secretario de Gobernación Santiago Creel, y el ex gobernador de Morelos Marco Adame, así como los senadores Héctor Larios y Marcela Torres Peimbert, y las ex legisladoras Gabriela Ruiz del Rincón y Blanca Judith Díaz.
También se encuentran Maximiliano Cortázar, cercano colaborador de Rafael Moreno Valle, ex gobernador de Puebla; Eduardo Aguilar, coordinador jurídico del blanquiazul; Jorge Romero, dirigente capitalino y Fernando Rodríguez Doval, vocero del partido.
Según los propios panistas, alrededor de 80 por ciento de los consejeros son afines al dirigente nacional del PAN, Ricardo Anaya, y sólo 20 por ciento restante simpatizan con los otros dos aspirantes a la candidatura presidencial del blanquiazul, Margarita Zavala y Moreno Valle.
Ello muestra cómo quedaron atrás los tiempos en que el calderonismo tenía control del consejo nacional y con ello de las principales decisiones del partido.
Entre las funciones de este órgano se encuentra la de aprobar la designación del candidato presidencial, si se lo solicita la comisión permanente, y ordenar la lista plurinominal de aspirantes al Senado. Asimismo, aprueba la plataforma electoral para comicios federales y designa a la comisión permanente, la cual, a su vez, nombra a candidatos a gobernadores, diputados y senadores, cuando se considera que no hay condiciones para una elección abierta a la militancia.
De quienes integran el consejo, 270 fueron electos en asambleas estatales y 30 designados por la comisión permanente. Los comicios para seleccionar a los primeros no estuvieron exentos de problemas, pues se registraron denuncias de acarreo, rasurado del padrón de militantes y negación de registro a delegados opositores a Anaya.