Como parte de las negociaciones que llevaron a que esta semana terminaran los paros de labores en la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), las autoridades de esa casa de estudios se comprometieron a revisar diversos aspectos del funcionamiento de la institución, como los pagos que reciben sus funcionarios y la situación financiera.

Otro de los asuntos que deberán analizarse son dos acuerdos que modifican la situación laboral de los profesores que los alumnos quieren que sean cancelados.

Se trata de los acuerdos 09/2016 y 10/16 publicados en mayo y julio por el rector general de la UAM, Salvador Vega y León. El primero cancela el otorgamiento de estímulos económicos a los docentes visitantes y de reciente ingreso en la universidad, mientras el segundo pone candados a la contratación de profesores temporales de tiempo completo, es decir, los que cubren las ausencias de los titulares.

Algunos universitarios consideran que la petición de los alumnos de que se cancelen estos aspectos es más bien una demanda que surgió entre los profesores de la UAM y que se aprovechó para que la planteara el movimiento estudiantil que se inició el 4 de julio exigiendo becas, y que unos días después incrementó sus peticiones y mantuvo tres semanas en paro de labores a las unidades Xochimilco y Azcapotzalco.

En tanto, alumnos que participaron en las protestas han dicho que consideran que los acuerdos y sus consecuencias también afectan a los estudiantes, pues señala que influirán en la calidad de la educación que se imparte en la UAM.

En todo caso, los alumnos y profesores no son los únicos que han pedido que se cancelen dichos acuerdos. Los consejos académicos de Azcapotzalco y Xochimilco han hecho llegar a Vega y León documentos en los que piden que se detenga la aplicación de tales acuerdos.

Luego de las protestas, el rector suspendió temporalmente la aplicación de éstos.

Una comisión del Colegio Académico, órgano constituido por representantes de todos los sectores de la UAM y encargado de definir las políticas institucionales, analiza las medidas y sus consecuencias para las funciones de la universidad.

El rector general Vega y León se comprometió a atender las decisiones que el colegio tome al respecto.