El Laboratorio Arte Alameda aloja la exposición The swimming pool series, de la artista Mónica Dower.

La muestra, que incluye video, fotografía, dibujo y acuarela, se abrió hace unos días en ese recinto del Centro Histórico. Consta de cuatro retratos de gran formato que no son descriptivos, sino líquidos, expresó la autora.

Para la instalación fueron considerados cuatro personajes –un investigador, un artista visual, un cantaor y una bailarina–, a quienes Dower metió en albercas públicas para transformar su discurso.

Es decir, detalló, utilizo las albercas para crear los retratos inesperados de personas cercanas y queridas que se vuelven los personajes de sus propias ficciones.

La idea, para Dower, consiste en cobijar diversas historias en el agua de la alberca. El azul del líquido, reluciente y brillante es el espacio artificial y paradójico donde registro utopías y pinto fantasías secretas.

En uno de los videos se observa al investigador Luis Rius Caso, quien dentro del agua relata la historia del rapto del barco Santa María en 1961 por Henrique Galvão con la intención de proclamar una república libre en contra de los regímenes dictatoriales de Franco y Salazar.

También la artista mostró el video Mi madre, donde aparece el cantaor de flamenco Pepe El Águila, mientras el artista Ricardo Atl Laguna hizo un performance en el agua y recordó a su abuelo, quien fue gran arquitecto en las fotografías que captó Dower.

Para el retrato femenino se observa a la bailarina Tatiana Zugazagoitia, quien corre alrededor de la alberca para contar otra historia.

Sobre el líquido vital al cual recurrió como eje temático, Dower puntualizó: Este elemento te permite fluir, ofrece libertad y transparencia; mientras, las albercas aportan a estos retratos una dimensión insólita que los reafirma en mi propio imaginario.

Experiencia de la intimidad

Para la curadora Agnès Mérat, la propuesta de esos retratos es una experiencia de la intimidad y la fragilidad de los personajes: el video, la acuarela, la fotografía, el trazo con carbón, la pintura acrílica entregan secretos que el verbo no deja escapar.

El género del retrato, escribe Mérat en la presentación de la muestra, evoca muchas veces un ejercicio de descripción y síntesis, pero estamos frente a otra propuesta: la de atravesar retratos parcelarios, incompletos, vivos, evidentemente líquidos. El agua de la alberca borra las definiciones usuales, los referentes sociales, las construcciones terrenales para entrar el territorio de la imaginación.

La exposición The swimming pool series concluirá el 7 de agosto en el Laboratorio Arte Alameda, ubicado en Doctor Mora 7, colonia Centro Histórico.