La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) enfatizó que la investigación sobre el crimen contra los normalistas de Ayotzinapa no está cerrada y no debe descartarse ninguna línea en las indagatorias, incluida la del narcotráfico.

El organismo nacional informó ayer que el informe del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) sobre el caso ya fue integrado a la investigación que realiza sobre el ataque contra los estudiantes de esa normal los días 26 y 27 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero.

Detalló que ha comenzado con el análisis del reporte de los expertos –que consta de más de 500 páginas y entre sus conclusiones señala que no hay evidencia científica para asegurar que los 43 normalistas desaparecidos hayan sido incinerados en el basurero de Cocula, y que el posible móvil del crimen puede ser que los estudiantes tomaron sin saberlo un camión cargado con droga–, por lo que dio la bienvenida al mismo.

Fallas y omisiones de la PGR

La relevancia y trascendencia del caso demandan que todas las investigaciones que se lleven a cabo con relación al mismo se desahoguen de manera objetiva, coherente, integral y exhaustiva; con apoyo en evidencias y criterios científicos rigurosos, a efecto de que los pronunciamientos que en su oportunidad se hagan permitan conocer la verdad, propiciar que los responsables respondan de sus actos y sean sancionados, y que se haga justicia conforme a derecho, evitando que exista impunidad y que los derechos de las víctimas sean violentados. Recordó que al menos 42 normalistas que siguen desaparecidos.

En una comunicación oficial, el organismo presidido por el ombudsman nacional Luis Raúl González Pérez subrayó que las pruebas y las evidencias que sustenten las conclusiones de las investigaciones serán las únicas vías para conocer la verdad sobre este caso.

La CNDH resaltó que el reporte de los expertos internacionales de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos presenta muchas coincidencias con el informe preliminar titulado Estado de la investigación del caso Iguala, presentado por la propia comisión nacional el 23 de julio de este año.

En ese documento, la CNDH señaló que las diligencias ministeriales sobre este crimen realizadas por la Procuraduría General de la República (PGR) presentan fallas y omisiones, además de que la indagatoria está ‘‘incompleta’’, por lo que ha sugerido la comparecencia –o ampliación de la declaración– de nueve militares.

El documento del organismo agrega que hay etapas no concluidas en la acción pericial, así como diligencias aisladas en el video presentado por el entonces titular de la PGR, Jesús Murillo Karam, con el cual aseguró haber llegado a la ‘‘verdad histórica’’ de los hechos que argumenta que los normalistas fueron calcinados en el tiradero de Cocula.

A juicio de la CNDH, el video, con testimonios de algunos involucrados, no reúne los requisitos legales para estimarlo en una construcción de hechos.

Por ello, ayer este organismo exhortó a las autoridades correspondientes a tomar en consideración las propuestas, observaciones y comentarios que se plantean tanto en el informe presentado por el GIEI el domingo pasado, como en el de la propia CNDH, particularmente la línea que apunta al narcotráfico.

La CNDH, por conducto de la Oficina Especial para el Caso Iguala, en el contexto de las investigaciones que realiza, seguirá interactuando con el GIEI, con fines de diálogo e intercambio de información y puntos de vista sobre la atención del caso, finalizó.