La incertidumbre internacional ejerce presión, asegura el titular de Hacienda
México, en evidente crecimiento que se refleja favorablemente en los bolsillos de los ciudadanos
Domingo 23 de agosto de 2015, p. 5
Las expectativas económicas del gobierno federal para 2016 habrán de ajustarse a la baja en los próximos días, derivado de la incertidumbre internacional, anunció el secretario de Hacienda, Luis Videgaray Caso.
Ante los diputados electos del PRI expuso que, paradójicamente, frente a la volatilidad del peso respecto de las monedas extranjeras, México se encuentra en un evidente proceso de crecimiento macroeconómico reflejado favorablemente en el bolsillo de los ciudadanos.
Al enunciar los efectos de la reducción de las expectativas de crecimiento nacional, indicó: “Estos son los últimos números que con el análisis que teníamos en marzo hemos entregado a la Cámara de Diputados, todavía a la Legislatura anterior. Con respecto al producto interno bruto en ese entonces, teníamos una estimación de un crecimiento para 2016 de 3.3 a 4.3.
“La estimación que habremos de presentarles a ustedes en el paquete económico no la hemos determinado todavía, pero como hemos puesto ahí, hay una presión evidente hacia un menor crecimiento. ¿Por qué? Porque el mundo está creciendo menos.
Sobre la perspectiva del valor del precio del petróleo, que se contemplaba en las expectativas del ajuste enunciadas en marzo pasado con un monto de 55 dólares, al día de hoy su valor alcanza 39 dólares por barril. Sin embargo, aquí hay una buena noticia, y es que la Secretaría de Hacienda ha llevado a cabo un programa de adquisición de coberturas y hemos podido cubrir un nivel de 49 dólares por barril
, agregó.
Sin optimismo infundado
Videgaray solicitó a los legisladores responsabilidad para asumir decisiones de carácter económico a partir de la negociación del presupuesto para el año próximo.
Al abundar en el tema petrolero, aceptó que la plataforma de producción proyectada para el año próximo, de 2.4 millones de barriles diarios, se reducirá. De lo que se trata es que actuemos con gran responsabilidad. De nada serviría al país que estuviéramos aprobando los ingresos para el año próximo a partir de supuestos que no son realistas y que se basarán en un optimismo infundado
.
En su explicación a los diputados electos de PRI y PVEM, afirmó que a pesar de tal escenario la economía está creciendo, “y más que el año pasado, más que el resto de las economías de América Latina. Está creciendo –dijo– porque está creciendo el empleo, porque están creciendo los salarios reales, y algo muy importante, tenemos la inflación más baja en décadas. Desde 1967 no teníamos una tan baja. Todo eso beneficia al bolsillo de las familias mexicanas”.
También defendió la reforma hacendaria, y asumió el costo político de ésta: “Créanme que como secretario de Hacienda, probablemente nadie entiende mejor el desgaste, el costo político, el desgaste ante la opinión pública que representa elevar los impuestos.
Uno de los objetivos fundamentales de la reforma hacendaria era disminuir nuestra dependencia de los ingresos petroleros. Lo que no imaginábamos es que el mundo nos iba a poner a prueba tan rápido... el cambio es radical y nuestra dependencia de los ingresos petroleros bajó de 40 a 16 por ciento
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Videgaray Caso llamó la atención de los próximos legisladores cuando expuso la interpretación del gobierno sobre el entreverado escenario económico global.
Cuando vemos el comportamiento del peso mexicano en los pasados dos años, se muestra que el desempeño de la economía mexicana y de las variables financieras en el país han tenido un mejor desempeño que los de economías como las de Colombia, Brasil, Rusia, Turquía o Sudáfrica. México ha sido una de las economías menos afectadas en el mundo
.
El funcionario atribuyó tal comportamiento a los fundamentos muy sólidos
en el terreno macroeconómico, porque se tiene una agenda de reformas estructurales con las que no cuentan otros países. Lo que México debe hacer es seguir con una estrategia consistente, responsable, de cuidar los fundamentos macroeconómicos y seguir en la implementación de las reformas estructurales
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Videgaray esbozó sus razones para mantener el equilibrio macroeconómico: lo hacemos no porque le estemos dando más importancia a lo macro sobre lo micro, o porque nos interesen las grandes variables más allá de la economía familiar; protegemos la estabilidad de la economía porque estamos protegiendo la economía familiar
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Recordó una conversación reciente con su homólogo de Colombia, Mauricio Cárdenas: “Me decía: ‘oye, Luis, hay algo que no entiendo de México, ¿por qué les preocupa tanto el dólar? Acá, cuando se devalúa la moneda, la gente lo festeja, pues van a llegar más turistas, vamos a exportar más, las remesas son mayores’, y yo le respondía: ‘tienes razón, Mauricio, y un poco de eso, por supuesto, pasa también en México’”.
En ese momento manifestó discordancia con el trato que dan los medios de comunicación al deslizamiento del peso frente al dólar y a la situación interna.
Piensen ustedes algo que veo poco reflejado en los medios de comunicación: hay una depreciación del tipo de cambio, al mismo tiempo que tenemos la inflación más baja en 50 años, que el desempleo está bajando, que tenemos cifras récord de creación de empleos formales en el IMSS, que está disminuyendo la informalidad y además está aumentando el consumo de las familias mexicanas, mejor que lo que estaba en años.
Recordó a los próximos legisladores del PRI y del Verde que al llegar a la Cámara de Diputados les aguardará la iniciativa de ley reglamentaria de la reforma en materia de deuda de estados y municipios.
México no tiene un problema de endeudamiento de los estados, cuando los vemos en conjunto; el problema es la tendencia de crecimiento que se observó particularmente entre 2008 y 2013, agregó.
Por ello, dijo, se establecerán reglas obligatorias para las entidades, que promuevan el sano desarrollo de sus finanzas; se dividirá a las entidades federativas según el grado de endeudamiento, precisó.