Dan la espalda al Congreso, donde opositores exigen juicio a la gobernante brasileña
Lula sale a la defensa: la crisis nació en el corazón de EU, no es culpa de la mandataria
Jueves 13 de agosto de 2015, p. 27
Brasilia.
Decenas de miles de mujeres manifestaron este miércoles aquí su respaldo a la presidenta de Brasil, la izquierdista Dilma Rousseff, quien advirtió: “no permitiremos ningún retroceso en las conquistas sociales y democráticas de nuestro país.
Continuaré trabajando para honrar y realizar sus sueños. Juntas seguiremos honrando la memoria de Margarita Alves y de todas las Margaritas de Brasil
, señaló la presidenta, en memoria de la líder sindical rural brutalmente asesinada en 1983 por defender mejoras en el campo.
Rousseff anunció en la Marcha de Margaritas varias medidas en el plano de la salud para las comunidades rurales, y en particular para las mujeres (evaluaciones preventivas de cáncer de mama, exámenes ginecológicos y vacunas), así como programas para el tratamiento de intoxicación por agrotóxicos y algunas líneas crediticias.
Las manifestantes, 35 mil según la policía y 70 mil de acuerdo con las organizadores, se pusieron de espaldas al Congreso, donde bancadas opositoras exigen el inicio de un proceso de destitución a la mandataria, y exigieron la renuncia del presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, del Partido Movimiento Democrático Brasileño (PMDB).
Venimos de todos los rincones para dar un recado al Congreso Nacional. Repudiamos las maniobras golpistas que intentan imponer su proyecto de poder
, dijo la vicepresidente de la Central Única de los Trabajadores, Carmen Foro.
En otro espaldarazo a Rousseff, quien ha enfrentado abucheos y cacerolazos en las últimas semanas, su antecesor Luiz Inacio Lula da Silva la eximió de la crisis el pasado martes, y en un acto en esta capital ante unas 6 mil campesinas, sostuvo: “la crisis nació en el corazón de Estados Unidos y hoy mucha gente está pagando por eso.
Hay quien dice que Dilma tiene la culpa, pero esas personas que se presentan como si tuvieran la solución para los problemas del mundo olvidan que cuando llegué a la presidencia este país estaba destruido, dependía del Fondo Monetario Internacional
, sostuvo el ex mandatario, cuyo nombre fue coreado por cientos de seguidoras.
Lula valoró positivamente la Agenda Brasil presentada por el PMDB a Rousseff para salir de la crisis económica y política, que considera la regulación de la tercerización (subcontratación) laboral, la reforma de la ley de licitaciones y una ley de responsabilidad fiscal específica para las empresas estatales.
Lula participó en un encuentro entre el vicepresidente Michel Temer y políticos del PMDB, entre ellos el ex presidente José Sarney; Cunha fue invitado, pero no asistió, pues se declara opositor al gobierno.
Para el domingo se convocó a movilizaciones en todo el país para exigir la renuncia de Rousseff.