Estudiantes que no fueron aceptados en diversas instituciones públicas de educación superior realizaron una marcha denominada 30 kilómetros, 30 horas, para demandar a rectores y directores de las principales universidades públicas del Distrito Federal que asistan a la mesa de diálogo pactada con la Secretaría de Educación Pública (SEP), el próximo día 12.

En dicha reunión, los rechazados analizarán con las autoridades la posibilidad de abrir espacios en las universidades para que continúen con sus estudios.

Alrededor de 100 jóvenes que integran el Movimiento de Aspirantes Excluidos de la Educación Superior (MAES) partieron después del mediodía de la rectoría general de la Universidad Autónoma Metropolitana a Ciudad Universitaria, adonde llegaron dos horas y media después.

Durante el recorrido, los manifestantes gritaban consignas y cargaban algunas pancartas con las leyendas: la educación es un derecho, no un privilegio; las escuelas normales no deben ser abatidas; nos han quitado todo, lo único que nos queda es luchar, y no sobran estudiantes, faltan universidades.

Prefieren excluirnos

En la máxima casa de estudios recordaron que cada año hay más de 200 mil jóvenes que quieren continuar sus estudios y presentan examen de admisión en las principales universidades públicas, pero no encuentran un lugar en la educación superior pública y de alto nivel académico.

No hay espacio para todos, porque en lugar de construir más universidades y contratar maestros, las instituciones de gobierno prefieren excluir a la mayoría de los estudiantes, reprocharon.

Advirtieron que si el rector de la UNAM) o alguna otra autoridad no asiste a la SEP la próxima semana están dispuestos a instalar un plantón en la explanada principal de la dependencia.

Sólo queremos diálogo para dar salida a nuestras demandas de mayor presupuesto a la enseñanza superior y que se aumente la matrícula universitaria. No dejaremos de movilizarnos hasta que incrementen los lugares. Hay dos aspirantes a la rectoría de la UNAM, pero ninguno ha propuesto más espacios.

Después de las 5 de la tarde, el contingente realizó una caminata hacia el Parque Hundido, donde instalaron un campamento para pernoctar.

En su último mitin, rechazaron opciones de universidades técnicas o politécnicas, así como del sistema de universidad abierta impulsado por la SEP, a fin de solucionar el problema de la baja matrícula universitaria.