Asegura que la isla ha hecho esfuerzos por cumplir los estándares
Martes 28 de julio de 2015, p. 22
Washington.
Estados Unidos mejoró la posición de Cuba en su más reciente reporte anual sobre Tráfico de Personas, por primera vez desde que incluyó a la isla en 2003, y la retiró de la última posición, al tiempo que acusó a Venezuela de no hacer suficientes esfuerzos y la mantuvo en el escalón más bajo.
En su argumentación para subir a la isla al segundo nivel de la lista de vigilancia, el Departamento de Estado dijo que el gobierno cubano ha hecho esfuerzos significativos
por cumplir con los estándares mínimos tendientes a eliminar el tráfico de personas, lo que incluye compartir información con Washington, mejorar la cooperación y ofrecer servicios a las víctimas.
El informe divide a los países en tres categorías según su desempeño en tráfico de personas. El primer nivel es para los países que cumplen con las normas mínimas de Estados Unidos; el segundo es para aquellos que hacen un esfuerzo significativo y, dentro de éste, la lista de vigilancia incluye a los que necesitan escrutinio especial. El tercer nivel es para países que no cumplen y no están haciendo esfuerzos significativos.
De acuerdo con el informe, que fue presentado por el secretario de Estado John Kerry, existen reportes de trabajo forzado en las misiones cubanas en el extranjero, que trasladan a 51 mil trabajadores a más de 67 países, pero el ministerio cubano de Trabajo y Seguridad Social ya formó un comité responsable de combatir la violencia y el tráfico sexual.
La mejora elimina un motivo de divergencia entre dos países, que restablecieron relaciones diplomáticas el 20 de julio. La mayoría de los países de América Latina están en el nivel dos, y Chile es el único en el escalón uno, junto a la mayoría de los países europeos y Australia.
Estados Unidos también mejoró la posición de Malasia en el reporte y lo incluyó en la lista de vigilancia, pese a llamados de grupos de derechos humanos y legisladores de mantener al país en el tercer nivel por su fracaso en frenar el tráfico de personas.
La medida suprime una potencial barrera para la firma del Acuerdo Transpacífico que han negociado 12 naciones, alentados por el presidente estadunidense, Barack Obama.
La vicesecretaria de Estado para Seguridad Civil, Democracia y Derechos Humanos, Sarah Sewall, negó que las consideraciones políticas hayan influido para sacar a Malasia del tercer nivel y que la decisión se basó en estándares de cómo el país trata el problema.
La mejora de nivel se dio pese al descubrimiento en mayo de decenas de tumbas en campamentos de traficantes de personas cerca de la frontera con Tailandia, que fue dejada en el tercer nivel por segundo año, junto a países como Irán, Corea del Norte, Zimbabue y Arabia Saudita.