Londres.

El suizo Roger Federer venció ayer al británico Andy Murray por doble 7-5 y 6-4, y jugará la final del torneo de Wimbledon este domingo ante el serbio Novak Djokovic, quien batió al francés Richard Gasquet por 7-6 (7-2) y doble 6-4.

Federer jugó uno de sus mejores partidos en el torneo y tuvo que batir a Murray y al público inglés, que apoyó al local en las dos horas y siete minutos que duró el partido.

Con sus respectivas victorias, el helvético y Djokovic reditarán la final del año pasado, que ganó el serbio.

Novak ha sido el mejor estos últimos años, lo sentí en 2014 aquí, pero espero ganar ahora, dijo Federer, quien disputará su décima final en la catedral del deporte blanco.

Disputar el título es un sueño porque será en la pista de tenis de mayor renombre en el mundo, dijo el número uno tras su victoria ante Gasquet.

Federer volvió a conseguir un triunfo sin ceder su servicio en el torneo –sólo lo perdió ante Gilles Simon en cuartos de final– y con un quiebre en el final de cada set se llevó la victoria.

Estoy increíblemente feliz. Quizás el público pensaba que jugaríamos cuatro o cinco sets, yo también, pero hoy jugué mejor, serví muy bien y supe mantener la presión, declaró el suizo.

A excepción de la bola de quiebre que enfrentó en el primer juego, Federer no tuvo fallas en el partido y transfirió el apremio a Murray, quien debió servir para mantenerse vivo en el 4-5 y en el 5-6 por haber elegido recibir en el sorteo inicial en los dos primeros sets.

Roger sirvió increíblemente bien en todo el partido. Jugué bastante bien, pero pude haber recibido mejor, dijo el número tres tras de su caída.

La final del domingo pondrá a Djokovic y Federer ante el enfrentamiento número 40 entre ambos. En el césped inglés se cruzaron dos veces: en 2012 en las semifinales ganó el suizo, mientras el serbio fue el campeón en la reciente edición.