Mexicali, BC.

La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) informó que mantiene la hipótesis de que fue intencional el incendio en el asilo Bello Atardecer, del ejido Querétaro, en el Valle de Mexicali, donde perecieron 17 personas, aunque no se hallaron acelerantes o restos de alguna bomba molotov.

Fernando Ramírez Amador, subprocurador de Justicia en Mexicali, anunció que peritos de la Procuraduría General de la República se sumarán a los estudios y análisis de campo.

Confirmó que dos personas declararon formalmente haber visto una camioneta pasar por la calle Quinta Sur momentos antes de la conflagración.

Además, las cámaras de seguridad del establecimiento funcionaban perfectamente, pero hubo un momento en que se apagaron, lo que ya investiga la Dirección de Servicios Periciales.

Hasta ahora los peritajes de la procuraduría local han descartado que el origen del fuego haya sido un líquido inflamable.

Los resultados preliminares de uno de los peritajes descartaron que la conflagración, en la que perecieron 17 personas y cuatro sufrieron heridas graves, se haya debido a una fuga de gas o un cortocircuito.

El gobernador Francisco Vega de Lamadrid y el alcalde Jaime Rafael Díaz Ochoa explicaron que una línea de investigación se centra en la quema (intencional o incidental) de un chamizo y un zacate que se encontraban en el patio del asilo; además, la Dirección de Servicios Periciales de la PGJE investiga las huellas recientes de un automóvil en esa área.

Uno de los heridos, Germán Ramón Pavón, de 64 años, tiene quemaduras en 70 por ciento de su cuerpo y se encuentra muy grave en el hospital general de Mexicali. Los otros tres fueron dados de alta y trasladados al asilo Carlos Canseco, del ejido Janitizo.