Deuda de $1.2 billones la pone en riesgo de perder campos asignados, advierte senadora
La petrolera plantea en un reporte a la CNBV que el régimen sea como el de otras empresas
Domingo 14 de junio de 2015, p. 24
Las posibilidades de que Petróleos Mexicanos (Pemex) compita con las empresas extranjeras que participarán en la explotación del petróleo son prácticamente nulas, debido a que, en lugar de disminuir su carga fiscal, como prometió el gobierno federal durante la negociación de la reforma energética, ésta se ha incrementado y la deja sin recursos para invertir.
En el informe correspondiente al primer trimestre del año que Pemex envió a la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) detalla que de enero a marzo de 2015 pagó 89 por ciento de su remanente operativo en impuestos, derechos y aprovechamientos.
Se trata del porcentaje más alto en los pasados 15 años. En 2014 fue de 78.7 por ciento.
En cambio, las petroleras extranjeras tendrán un régimen preferencial, ya que además de una menor carga tributaria, podrán deducir la totalidad de sus costos e inversiones.
La situación es tal que en ese informe a la CNBV la ahora empresa productiva del Estado considera hacer cambios. Hacia adelante es deseable que el régimen fiscal que se aplique a Pemex sea comparable con el de otras empresas del sector. El que todos los participante cuenten con las mismas reglas es un elemento indispensable para que la reforma energética rinda todos los frutos que esperamos
.
Pemex resalta en ese estudio que, a diferencia de otras empresas, aún no puede deducir la totalidad de sus costos y gastos de operación en el cálculo de impuestos y derechos y, como consecuencia de ello, el pago de éstos ha sido mayor al rendimiento de operación
.
Al respecto, la senadora del PRD Dolores Padierna dijo que se trata de una estrategia clara para desmantelar a Pemex y acelerar la entrega de los hidrocarburos a corporaciones extranjeras. Recordó que uno de los principales argumentos del gobierno federal durante la negociación de la reforma energética es que le quitarían la pesada carga fiscal, a fin de que tuviera recursos para invertir en exploración y explotación de sus yacimientos, pero no es así.
Expuso que, según se desprende de ese informe y de otros que Pemex presentó ante la Comisión Permanente y la Securities and Exchange Commission (SEC) de Estados Unidos, es víctima de un tratamiento fiscal discriminatorio, con una mayor carga impositiva y condicionamientos que no se le hacen a las empresas privadas.
Por ejemplo, señaló que en el primer trimestre, a Pemex sólo se le permitió deducir 28 por ciento de sus inversiones, costos y gastos. Además, su presupuesto se recortó en más de 62 mil millones de pesos y le retiraron recursos líquidos.
Además de ello, a partir de 2016, la Secretaría de Hacienda impondrá a Pemex un impuesto adicional, acordado en la reforma energética. El pago de un dividendo estatal que ese año será de 30 por ciento de los ingresos, menos los impuestos y derechos. Las trasnacionales no tendrán esta carga adicional, que hará que Pemex deba seguir endeudándose para cumplir con sus compromisos.
La senadora Padierna recalcó que Pemex inicia la etapa de competencia con las petroleras extranjeras con una deuda acumulada de un billón 278 mil millones de pesos, que sólo por el pago de intereses le significa una erogación de 50 mil millones de pesos anuales. Parte de esa deuda la destinó a la exploración de campos que ya le quitaron como consecuencia de la reforma energética
, pero también a otros fines.
La legisladora destacó que en 2014 la deuda de Pemex se incrementó en 423 mil millones de pesos, pero las inversiones sólo fueron de 277 mil millones de pesos. La diferencia la utilizó para cubrir el retiro efectivo que le impuso la SHCP, el pago de intereses y para gasto corriente
.
Aunado a ello, Pemex tiene un pasivo laboral de un billón 494 mil millones de pesos, que le significó un gasto de 45 mil millones de pesos en 2014 y que se incrementa en aproximadamente 15 por ciento al año. Los contratistas privados no tendrán este pasivo, ya que seguramente contratarán a su personal en condiciones mucho más favorables
.
Tan sólo en el primer trimestre de este año, Pemex ya contrató deuda por 170 mil 153 millones de pesos, 78.7 por ciento más que en igual periodo de 2014.
El recorte presupuestal, añadió, “la llevará a reducir sus programas de inversión, lo que repercutirá en que siga disminuyendo su capacidad de producción y lo que es más grave, abre la posibilidad de que le sean revocadas las asignaciones que se le otorgaron en la llamada ronda cero”.