Es la primera operación que admite Washington contra el EI en el país árabe
Combatientes del Estado Islámico ingresan a la histórica ciudad de Palmira; ejecutan a 48
Domingo 17 de mayo de 2015, p. 20
Washington.
Fuerzas especiales estadunidenses dieron muerte a un importante líder del Estado Islámico (EI) identificado como Abu Sayyaf, durante un operativo que buscaba capturaelo en la localidad siria de Al Amr, informó ayer el secretario de Defensa, Ashton Carter, en lo que fue la primera operación terrestre de Estados Unidos confirmada públicamente contra la organización yihadista en Siria.
Combatientes del EI, por su parte, entraron hoy en Palmira y se apoderaron de la mayor parte de la histórica ciudad siria, declarada Patrimonio Mundial de la Humanidad por la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
Abu Sayyaf, abatido al oponer resistencia a su captura durante el operativo llevado a cabo la noche del viernes, era el responsable de gas, petróleo y otras operaciones financieras, aunque también ayudaba en las acciones militares del grupo, señaló Carter, quien dijo que la muerte del líder implica un nuevo golpe al EI.
El Estado Islámico se ha apoderado de la mayoría de los campos petroleros y de gas del este sirio, pero los bombardeos de las fuerzas de la coalición internacional dificultan en parte su aprovechamiento como recurso financiero. Desempeñó un rol capital en la gestión de las operaciones ilícitas del EI en el gas y el petróleo, fuente clave de ingresos
de la organización, detalló a su vez la Casa Blanca.
A Sayyaf se le consideraba alguien que financiaba
, pero que estaba cada vez más implicado en el lado operativo
de la organización yihadista, explicó un funcionario de Defensa de Estados Unidos.
Durante el operativo, en el que fueron abatidos una docena de milicianos yihadistas, fue detenida la esposa del dirigente, Umm Sayyaf, de quien se sospecha habría desempeñado un papel clave en las actividades armadas del EI. Además fue liberada una joven yazidí que era utilizada como esclava, señaló la portavoz del Consejo estadunidense de Seguridad, Bernadette Meehan.
Los yazidíes, minoría religiosa del noroeste de Irak con orígenes muy antiguos, son perseguidos por el EI. Las mujeres han sido secuestradas, violadas y vendidas entre los extremistas, según grupos de derechos humanos.
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, autorizó la operación por recomendación de su equipo de seguridad nacional. Ésta se realizó con pleno conocimiento de las autoridades iraquíes. La Casa Blanca dijo que Washington no informó al gobierno del presidente sirio, Bashar Assad, antes de la incursión, ni se coordinó con Damasco.
Si bien Estados Unidos está trabajando estrechamente con Irak en la lucha contra el Estado Islámico, ha rechazado la idea de cooperar con Assad, pues sostiene que el presidente sirio ha perdido legitimidad y debe dejar el poder.
Aumenta número de fallecidos
El opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH), con sede en Gran Bretaña, confirmó el ataque en la ciudad petrolera de Amr, situada en la provincia de Deir Ezzor y en poder del Estado Islámico, pero elevó el número de milicianos muertos a 19, de los cuales 12 eran extranjeros, durante un bombardeo aéreo previo al operativo terrestre.
El movimiento extremista hizo ayer una demostración de fuerza frente al ejército de Siria y entró a Palmira, donde logró tomar el control del norte de la histórica ciudad, que tiene una importancia estratégica para el EI, ya que su conquista abriría el camino hacia el desierto sirio, limítrofe con la provincia iraquí de Al Anbar.
En su avance hacia Palmira, los extremistas ejecutaron a unos 49 civiles en las últimas 48 horas, incluidos niños, mientras bombardeos aéreos del ejército sirio en tres ciudades de la provincia de Idleb controladas por fuerzas antirrégimen causaron la muerte de 48 civiles, entre ellos nueve menores, indicó el OSDH.
En Irak, ataques aéreos liderados por Estados Unidos obligaron al EI a retirarse de un edificio del gobierno en Ramadi, sobre el que ondeaba desde el viernes la bandera negra del grupo, informó la alcaldía.
En Nigeria, una mujer se suicidó al detonar una bomba en un concurrido mercado cercano a una estación de autobuses en Damaturu, capital del estado de Yobe, lo que ocasionó la muerte de al menos a siete personas y heridas a 27, afirmaron testigos.