Las Vegas.

Esta semana, Manny Pacquiao espera una cirugía por una lesión en el hombro derecho –a la que atribuyó su poca efectividad ante Floyd Mayweather–, pero también el panorama se le ensombrece en otros frentes.

Dos personas presentaron ayer una demanda en su contra, alegando que pagaron sus boletos para ver la pelea del siglo, pero se sintieron defraudadas por la supuesta decisión del filipino de no declarar una lesión en el hombro antes del combate.

Por esa razón, las autoridades de boxeo en Nevada estudian la posibilidad de sancionar con una multa o suspensión al filipino.

La demanda contra Pacquiao fue presentada ante una corte federal en Nevada y se busca compensación amparándose en una ley de protección al consumidor, con la que se quiere proteger a través de una acción colectiva a quienes compraron boletos, pagaron por ver la transmisión por televisión e incluso a quienes apostaron por el resultado de la pelea.

Top Rank Inc, empresa de promoción que representa al pugilista asiático, no respondió de inmediato y los abogados de la compañía y del filipino tampoco respondieron a los llamados.

Francisco Aguilar, director ejecutivo de la Comisión Atlética de Nevada, informó que la fiscalía del estado investigará por qué Pacquiao firmó un no en el día previo de la pelea cuando le tocó llenar el cuestionario de la comisión sobre si tenía una lesión en el hombro.

Vamos a recabar toda la información y a analizar las circunstancias, señaló Aguilar.

El promotor de Pacquiao difundió una declaración escrita en nombre del boxeador, en la que indicó que la lesión fue divulgada a la Agencia Antidopaje de Estados Unidos (USADA, por sus siglas en inglés), que aprobó el uso de una inyección antinflamatoria, pero la responsabilidad del organismo sólo fue realizar los controles antido paje durante los entrenamientos y la noche de la pelea.

“No recibimos información médica, resonancias ni documentos. No fue un asunto de antidopaje. La gran pregunta es por qué su equipo puso no en el formulario. En todo caso cometieron un grave error al no cumplir con las reglas o no querían que el bando contrario se enterara. No creo que exista un punto medio”, dijo Travis Tygart, director de la USADA.

Precisó que su agencia, contratada por los promotores para supervisar los controles del combate, fue contactada el 7 de abril preguntando sobre el uso de varias sustancias y si eran permitidas en la normativa antidopaje.

Añadió que 10 días después recibieron otra llamada para preguntar sobre el uso de otra sustancia, pero que la USADA no supo para qué era el tratamiento.

Cuando faltaba algo más de dos horas para el pleito, la esquina de Pacquiao pidió a las autoridades de Nevada si podían inyectarle Toradol, el antinflamatorio.

Aguilar negó la solicitud al sostener que la comisión no tenía referencia previa sobre una lesión y que no podía permitir la inyección para ser justos con Mayweather.

Nuestra función es salvaguardar la salud de los peleadores y la integridad del deporte. Confiamos en que los boxeadores sean sinceros. dijo Aguilar.

Mientras tanto, Mayweather dijo que estaría abierto a una nueva pelea contra Pacquiao una vez que el filipino se recupere de la operación: Voy a pelear con él dentro del año posterior a su cirugía, dijo en un mensaje de texto.