Cuernavaca, Mor., 15 de diciembre.

La retrospectiva Olga Costa: apuntes de naturaleza 1913-2013, una recuperación y un homenaje en el centenario de la pintora de origen alemán que vivió en México, fue inaugurada este sábado en el Centro Cultural Jardín Borda de esta ciudad, con lo cual se reabre el espacio museístico del recinto.

Formado por alrededor de 60 obras procedentes de colecciones privadas y de instituciones nacionales y extranjeras, el conjunto se expuso por primera vez en febrero pasado en el Museo del Palacio de Bellas Artes, para romper los más de 20 años sin que la artista haya tenido una muestra.

También se abrieron en ese recinto de Cuernavaca Naturaleza herida, de Manuel González Serrano (1917-1960), y Ciudades visibles, de Miguel Ángel Madrigal, exposiciones que concluirán en marzo de 2014.

Juan Rafael Coronel, curador de la retrospectiva que incluye una de las piezas más conocidas de Olga Kostakowsky (su nombre de nacimiento), La vendedora de frutas, recordó en charla con medios que la última exhibición sobre la artista se realizó en 1989, durante el Festival Internacional Cervantino, y que luego vino a la ciudad de México, a la sala Ollin Yoliztli.

Aseguró que es el momento para hacer esta revisión, “justamente los 20 años que han pasado desde su muerte son los que le hacían falta. La cuidamos mucho, porque era una pintora muy dispareja: tenía telas extraordinarias, pero también otras donde no le echaba tanta energía. En esta curaduría buscamos que todas las piezas tuvieran muchísima calidad.

Geometría, su interés

“Lo que realmente le llamaba la atención eran las formas. Lo que le interesaba era la geometría. En su gran cuadro, La vendedora de frutas, vemos la dinámica de la geometría de las frutas, cómo las acomodó. Si uno entrecierra los ojos y lo ve a distancia, es un cuadro abstracto formado por planos; tiene toda la parte metodológica más la metafísica; entonces, su relación es esta: era lo que le daba alegría, como ella declaraba”.

Olga Costa: apuntes de naturaleza está formada por siete módulos –explicó: “Empieza con su etapa formativa, las piezas que salen desde que ella estudia unos meses en la Academia de San Carlos y con su marido, el también pintor José Chávez Morado; después la representación de los personajes (…); el paisaje con la geometría (…), luego entramos al paisaje geométrico; al naturalista, y la naturaleza muerta. Aquí no llega el módulo surrealista, porque nada más teníamos dos piezas y retiraron una, entonces la restante la integramos en la parte de los autorretratos”.

Coronel Rivera rechazó que Costa haya sido opacada por su esposo: Ella no quiso ser protagonista; no le gustaba salir, estaba en su casa. Tenía una vida muy íntima. Se interesa mucho por los minerales. Tuvieron colecciones muy importantes de arqueología, que ahora están en los museos de Guanajuato, pero sus favoritas eran maderas, conchitas, fragmentos de mineral, porque le interesaba todas esas figuras geométricas.

El gobernador de Morelos, Graco Ramírez, anunció que se recuperará el mural de Costa ubicado en el Balneario Agua Hedionda, en Cuautla. Arriba, autorretrato de la artista que forma parte de la exposición

Destacó entre las piezas incluidas una reproducción del único mural realizado por Costa (1913-1993) en conjunto con su esposo Chávez Morado. Lo que le interesó realmente fue que todavía la naturaleza morelense estaba bien preservada, para animarse a hacer esta, su única pieza pública.

Durante la ceremonia de apertura, Rafael Tovar y de Teresa, titular del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (Conaculta), se refirió a las exposiciones: “Son dos artistas prácticamente contemporáneos, pero con dos visiones del arte muy distintas. Es uno de los grandes artistas (González Serrano), casi podría usar el adjetivo ‘olvidado’ de México.

“Es un hombre que a través de una de las grandes visiones surrealistas, como definió Luis Cardoza y Aragón, pudo expresar un México con una raíz en Jalisco, de Lagos de Moreno –donde nació él– y pudo combinarla con la visión surrealista. Necesita por todos los medios ser revalorado”.

Más tarde se refirió a Olga Costa: “Su mexicanismo lo logra en buena parte con su sensibilidad e inteligencia, pero con la presencia e influencia de su esposo José Chávez Morado… representa el imaginario mexicano”.

Por su parte, Graco Ramírez, gobernador de Morelos, anunció que se realizaría la recuperación del mural de Costa ubicado en el Balneario Agua Hedionda, en Cuautla, para lo cual pedirían apoyo al Conaculta.

La inauguración contó también con la presencia de los directores de los museos del Palacio de Bellas Artes, Miguel Fernández Félix, y del Mural Diego Rivera, Luis Rius Caso, entre otros.

En entrevista con medios, María Helena Noval, curadora de la muestra Naturaleza herida, de Manuel González Serrano, definió: “Su apuesta pictórica sale del nacionalismo que imperaba en la pintura mexicana (…) que dejaba de lado la historia de otros pintores, que si bien estaban interesados en lo mexicano y lo representaban, también estaban interesados en la vida particular, la mental y emocional de las personas. En el caso de González Serrano se agrega el tema del erotismo.

Esta selección de pinturas por primera vez pone en escena el erotismo en el arte mexicano, pero no desde el punto de vista tradicional(...), sino el que tiene que ver con la representación metafórica.