Iglesias por la Paz expresó su solidaridad a la novena Caravana de Madres Centroamericanas, quienes buscan a sus hijos desaparecidos, la cual reúne a alrededor de 60 mujeres de Honduras, Nicaragua, El Salvador y Guatemala, que efectúan el recorrido de sus familiares por Centroamérica, México y Estados Unidos, con la esperanza de encontrarlos.

Iglesias por la Paz explicó que la caravana “recorrerá zonas consideradas focos rojos, donde los migrantes, encaramados en La Bestia, son frecuentemente secuestrados, asesinados y extorsionados por el crimen organizado, incluso por funcionarios de Migración y otras autoridades corruptas”. Subrayó que la misión de esas madres es no sólo denunciar, sino posibilitar encuentros, como el ocurrido el 5 de diciembre en San Luis Potosí, cuando luego de 27 años de no verse María de los Santos Ávila, originaria de Tegucigalpa, localizó a su hijo José Armando Salgado Ávila.

La agrupación, en la que convergen iglesias y organizaciones de diferentes confesiones religiosas, aseveró: Nos pronunciamos ante la situación inhumana que están viviendo nuestros hermanos centroamericanos que pasan por territorio mexicano. Ellos no son delincuentes, sino personas trabajadoras que han salido de sus países con la esperanza de tener un mejor nivel de vida.

Añadieron: Desde el derecho a migrar, nos pronunciamos por que existan condiciones económicas y sociales para que las personas no sean forzadas a abandonar sus naciones de origen en busca de mejores oportunidades; que exista seguridad durante los recorridos que hacen; que se modifiquen radicalmente las políticas migratorias tanto de los países por los que transitan como de los que los reciben; que terminen las complicidades entre autoridades migratorias y el crimen organizado, y que los gobiernos asuman sus responsabilidades en la desaparición de migrantes.