Llega Peña Nieto tras 22 horas de vuelo; montará guardia y regresará a México
Unos 100 jefes de Estado asistirán a la ceremonia para despedir al líder que derrotó el apartheid
Martes 10 de diciembre de 2013, p. 16
Johannesburgo, Sudáfrica, 9 de diciembre.
Sudáfrica está desbordada. Los funerales del ex presidente Nelson Mandela han rebasado toda previsión y preparativos, pues se encuentran aquí, o están por arribar, alrededor de un centenar de jefes de Estado con sus respectivas comitivas, sólo para dar rendir homenaje al líder que puso fin al apartheid.
Además, confió una fuente de la embajada de México en este país, alrededor de 11 mil periodistas de todo el mundo han solicitado acreditación para cubrir los diversos actos luctuosos para Mandela, los cuales concluirán el próximo domingo en Qunu, aldea natal del dirigente.
Tal interés por despedir a Madiba ha convertido Johannesburgo, más allá de una improvisada capital mundial, en un lugar caótico.
El presidente Enrique Peña Nieto llegó esta noche, después de 22 horas de vuelo, de la ciudad de México –con escalas del avión TP-01 en Guyana Francesa y Costa de Marfil–, acompañado sólo por el canciller José Antonio Meade; el coordinador de Comunicación, David López; el jefe del Estado Mayor, general Roberto Miranda, y su secretario privado, Jorge Corona.
Sin otro programa que participar junto con el resto de los líderes políticos que han llegado de todo el mundo en los funerales de Estado que tendrán lugar en el FNB Stadium –también conocido como Soccer City–, el Presidente mexicano, llegado el turno dispuesto por los organizadores, será uno de quienes montarán guardia de honor ante el féretro de Mandela.
De ese modo, más allá de las improvisadas conversaciones que durante la espera y el desarrollo del programa –que se llevará a cabo de las 11 a las 15 horas tiempo local– pueda tener el mandatario con alguno de sus homólogos, su participación en Sudáfrica será sólo de algunos minutos.
Algunos oradores en el homenaje
Ello no será diferente, sin embargo, de la participación del resto de los mandatarios. El programa del gran homenaje en el estadio –donde, por cierto, la selección mexicana jugó en 2014 sus partidos contra la anfitriona Sudáfrica y contra Argentina– incluye diferentes oradores, tanto de integrantes de la familia Mandela como de líderes políticos del mundo, entre ellos el secretario general de la Organización de Naciones Unidas, Ban Ki-moon.
Asimismo, intervendrán el líder africano Nikosana Dlamini y los presidentes de Estados Unidos, Barack Obama; Cuba, Raúl Castro; Brasil, Dilma Roussseff; India, Pranab Mukherjee, y Namibia, Hifikepumye Pohamaba, así como el vicepresidente de China, Li Yuanchao.
En la segunda escala del TP-01 para recargar combustible en Costa de Marfil, Peña Nieto se reunió con el ministro de Petróleo y Energía de esa nación, Adama Toungara, quien a decir de Los Pinos felicitó al mandatario mexicano por las reformas impulsadas en el país y anunció la próxima visita de una delegación de alto nivel.
Se contempla que la ceremonia en el Soccer City será transmitida por cadenas de televisión de todo el mundo y en México será difundida a las 3 am.
El programa de Peña Nieto considera un mensaje a los medios de información al terminar dicha ceremonia y de inmediato volará de regreso a la ciudad de México.
Cumplirá así con el interés de patentizar los respetos del pueblo mexicano a Mandela, para lo cual habrá cubierto 44 horas de vuelo por menos de 24 horas de estancia en suelo sudafricano.