El presidente se dice dispuesto a negociar
Martes 10 de diciembre de 2013, p. 25
Moscú, 9 de diciembre.
Acorralado frente a una multitudinaria protesta que dura ya 20 días, el presidente de Ucrania, Víktor Yanukovich, dio señales contradictorias este lunes al mostrarse como un mandatario que no duda en aplicar una política de mano dura y, al mismo tiempo, pretende ser visto como gobernante conciliador.
Por un lado, ordenó que las unidades antidisturbios Berkut, reforzadas con soldados de las tropas del Ministerio del Interior, comenzaran a despejar esta noche sin contemplaciones las calles cercanas a las sedes de la presidencia, del gobierno y de la Rada (Parlamento), así como a retirar las barricadas que impedían el acceso a las mismas.
Y por el otro, se dijo dispuesto a negociar con la oposición este martes en una mesa redonda nacional como plataforma para un entendimiento
, a la que también invitó a sus tres antecesores en la presidencia de Ucrania –Leonid Kravchuk, Leonid Kuchma y Víktor Yushenko–, que hace unos días difundieron un comunicado de apoyo a los manifestantes y se ofrecieron a contribuir a la búsqueda de un arreglo político.
Ni el despliegue de fuerza ni el gesto conciliador gustaron a los opositores. En el primer caso, aunque no hubo excesos de violencia ni enfrentamientos, consideran que es el primer paso para desalojar en cualquier momento la Plaza de la Independencia, el epicentro de las movilizaciones, que esta noche tenía unas 10 mil personas, y los edificios de la alcaldía y los sindicatos, aún tomados por los descontentos.
En cuanto a la invitación a negociar no se sabe quiénes irán, si es que decidien participar, ya que algunos dirigentes se muestran recelosos ante la investigación que pretende involucrarlos en un intento ilegal para deponer a las autoridades.
El Servicio de Seguridad irrumpió hoy en las oficinas del partido Batkovschina (Patria) y se llevó todas las computadoras, en busca de evidencias de que sus dirigentes traman un cambio violento de régimen constitucional.
Nos invitan a negociar y, a la vez, nos citan a declarar en la procuraduría como sospechosos
, resumió sus dudas el líder de ese partido, Arseni Yatseniuk, aparte de que considera que Yanukovich no cumplió ninguna de las tres condiciones para iniciar conversaciones: la dimisión del gobierno, la liberación de los manifestantes detenidos y el castigo a los responsables de la represión en la madrugada del 30 de noviembre.
Este martes llegará a Kiev la enviada de la Unión Europea, Catherine Ashton, para reunirse con Yanukovich y los líderes de la oposición, en un intento de mediación. También se espera que, en Moscú, la Duma emita una declaración sobre lo que está sucediendo en el vecino país eslavo.