Los magros resultados obtenidos en el Programa para la Evaluación Internacional de Alumnos (PISA-2012, por sus siglas en inglés), de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) no son responsabilidad del gobierno de Felipe Calderón, porque el deterioro y la crisis en el sector se gestó por lo menos 20 años atrás, afirmó el titular de la Secretaría de Educación Pública (SEP), Emilio Chuayffet Chemor.

En el contexto de la presentación del informe de PISA, el funcionario dijo que esta administración sabía que la enseñanza estaba mal, y por ello el presidente Enrique Peña Nieto planteó como una de las cinco prioridades de su gestión la educación de calidad con equidad.

Anuncia consulta nacional

Lo que tenemos ahora, señaló Chuayffet, no corresponde a las expectativas de los padres, los maestros, los alumnos ni del propio gobierno, admitió.

Por ello, dijo, se deben hacer esfuerzos para que la reforma educativa, así como sus leyes secundarias, no se queden en letra muerta, y se vuelvan una realidad. Expuso que por primera vez estos cambios logrados con la reforma constitucional reconocen a los padres como agentes educativos, ya que antes estaban excluidos, lo cual es un error garrafal.

El funcionario reconoció los resultados de PISA y dijo que este gobierno los asume como un gran reto. México vive un momento único para enfrentar la transformación del sistema de su enseñanza.

Chuayffet Chermor anunció que el gobierno federal realizará una consulta nacional para saber qué hacemos con el modelo educativo en su conjunto y con la enseñanza normal.