Por falta de quórum, la sesión extraordinaria del Consejo Nacional del PAN fue suspendida ayer sin que se lograran aprobar las reglas para la renovación de la presidencia del partido ni la integración de la comisión organizadora del proceso electoral.

Este último fue el tema de quiebre, pues calderonistas, olivistas y josefinistas acusaron a los maderistas de pretender una instancia a modo que, dijeron, no garantiza imparcialidad y equidad en la contienda.

Tras la ruptura del quórum, el dirigente Gustavo Madero informó que el próximo 9 de diciembre se reunirá el Comité Ejecutivo Nacional (CEN), y ahí presentará una propuesta para que se reanuden los trabajos del consejo, lo cual podría ocurrir este mismo mes o a principios del próximo año.

De reiniciar la sesión hasta 2014, la elección del jefe nacional se postergaría más allá de marzo, cuando los panistas preveían que se efectuarían los comicios, mientras la gestión de Madero también se alargaría, pese a que formalmente debe concluir el 4 de diciembre.

Ante esta situación, los aspirantes al cargo: Ernesto Cordero, Josefina Vázquez Mota y Juan Manuel Oliva unieron fuerzas para exigir que el CEN y el consejo sean convocados a la brevedad, y se restituya la vida institucional del PAN.

En un comunicado conjunto, pidieron que en las próximas reuniones impere la unidad y se garanticen las condiciones de transparencia en los procesos que se avecinan. Somos un partido de historia democrática y, como tal, debemos tomar en cuenta todas las voces para poder llegar a consensos y acuerdos que fortalezcan la institución, enfatizaron por la noche.

Uno de los temas que provocaron fricción y enojo fue la integración de la Comisión Organizadora de la Elección, que deberá ser integrada por siete personas.

Otro elemento que causó la molestia de calderonistas, olivistas y josefinistas fue la modificación del acuerdo logrado en la última sesión del CEN, según el cual la integración de la citada instancia sería aprobada por las dos terceras partes del consejo.