La Haya, 22 de noviembre.

La Corte Internacional de Justicia (CIJ) zanjó finalmente este viernes el diferendo territorial entre Nicaragua y Costa Rica. Ordenó a Managua detener un dragado recientemente efectuado en el río San Juan, reparar el daño y sacar a personal civil y militar que se encuentra en el sitio, el cual es fronterizo con Costa Rica.

En un fallo emitido este viernes, la CIJ dio a Nicaragua dos semanas para concluir el llenado de un canal abierto en la región fronteriza, centro de una larga disputa entre las dos naciones vecinas.

Costa Rica reclamó en septiembre pasado a la CIJ que ordenara a Nicaragua suspender la construcción de dos canales artificiales en la isla Portillos (Harbour Head, para los nicaragüenses), pequeño humedal en el extremo oriental de la frontera común.

Nicaragua aseguró que cumplirá las medidas dictadas por la CIJ, presidida por el juez Peter Tomka.

El representante de Nicaragua ante la Corte Internacional de Justicia de la Haya, Carlos Argüello, aseveró que ya esperaba la decisión de ese tribunal, pues el gobierno de Managua admitió el error de haber incursionado en la zona, la cual le fue vedada por los jueces en marzo de 2011.

La orden de la Corte era más o menos lo que nosotros esperábamos, señaló Argüello, quien al referirse a las nuevas medidas ordenadas por la CIJ sobre la reparación de daños y la retirada total del lugar afirmó que Nicaragua ya había anunciado que estaba dispuesta a hacer eso.

El ministro de Relaciones Exteriores de Costa Rica, Enrique Castillo, expresó que su gobierno espera que Nicaragua acate el fallo para normalizar la situación hasta que se dicte la resolución final por esa disputa.

“Es un fallo determinante. De forma unánime, los jueces señalaron que Nicaragua había emprendido obras en la zona –declarada en disputa– y le ordenó cerrar la zanja que personal suyo había abierto con la intención de unir el nuevo caño con el mar Caribe”, comentó Castillo.

La presidenta de Costa Rica, Laura Chinchilla, celebró el fallo de la Corte y dijo: Nos sentimos muy satisfechos con la resolución emitida por la CIJ. Confirma que el derecho internacional responde en defensa de nuestra soberanía.