Aunque el enfermo está grave y parece no tener remedio, una buena terapia logrará que la marcha mexicana recupere el protagonismo internacional en los Juegos Olímpicos de Río 2016, aseguró el coordinador de la especialidad José Alvarado, quien expuso que debe aprovecharse la oportunidad de trabajar todos por lograr ese objetivo, y dejar de lado los individualismos.

Explicó que las principales autoridades deportivas aprobaron su propuesta para que luego de los Juegos Centroamericanos y del Caribe Veracruz 2014, sólo queden cinco entrenadores especializados en cada una de las categorías de la marcha con quienes trabajarán sólo los mejores de los 50 y 20 kilómetros varonil y femenil, así como de los juveniles.

Y para evitar que los egos puedan malograr el proyecto, aclaró, se escogerá a estos entrenadores con base en los resultados que obtengan en las competencias en que participen desde los siguientes días, porque Alvarado sabe que hay algunos ex competidores exitosos, pero eso no los hace necesariamente buenos preparadores.

Reconoció que algunos trabajando como la gallina ciega, picoteando en el suelo, lograron por ahí tener algunos buenos resultados, pero fue más porque se encontraron una futura promesa que por saber verdaderamente cómo prepararlos, por lo que eso deberá superarse.