La Comisión de Radio, Televisión y Cinematografía del Senado, que preside la perredista Alejadra Barrales, recibió ayer a productores, distribuidores, actores y empresarios, que demandaron la aprobación de las reformas pendientes para fortalecer al cine mexicano.

Entre ellas, para establecer una cuota de pantalla de 20 por ciento del tiempo total de exhibición de películas nacionales y que su tiempo de permanencia en cartelera no sea inferior a tres semanas.

Asimismo, modificar las leyes del Impuesto Sobre la Renta (ISR) y Federal de Cinematografía para incrementar de 500 millones a 650 millones de pesos los recursos destinados a apoyar al cine nacional, así como aumentar los diversos estímulos fiscales orientados a esta actividad.

La senadora Barrales recalcó que interesa escuchar la opinión de los verdaderos actores de esa industria, a fin de llevar a cabo las reformas necesarias a la ley federal de cinematografía.

En su turno, el presidente de la Asociación Mexicana de Productores Independientes, Miguel Necoechea, hizo notar que el cine no escapa al fenómeno de la dominación y concentración económica en el país.

Como ejemplo de ello expuso que existe un desequilibrio monumental para el cine mexicano, debido a que imperan las condiciones inequitativas y desiguales con las que sale a competir contra la hegemonía y homogenización de las películas de Hollywood, las que acaparan 95 por ciento del mercado en México.

Planteó a los legisladores establecer en la ley que las dos cadenas de televisión queden obligadas a canalizar parte de los enormes ingresos que reciben por la venta de espacios de publicidad a la producción de películas mexicanas.

En la reunión intervino también Víctor Ugalde, titular de la Sociedad Mexicana de Directores-Realizadores de Obras Audiovisuales, quien expuso que el problema que enfrenta el cine nacional es complejo, entre otras cosas, por la pésima Ley de Competencia Económica que tenemos.

Explicó que 45 por ciento del cine mexicano se concentró en siete estados de la República. Es decir, estamos hablando de 25 estados sin cine mexicano, y eso es terrible. Además de ello, el uso en el tiempo de pantalla sólo fue de 14 por ciento en esas entidades.

Por ello, advirtió, el cine sólo va a sobrevivir si tiene acceso a todas las salas, por lo que se necesita sumar esfuerzos para lograr ese propósito.

En su turno, el actor Sergio Mayer consideró que se debe precisar en la ley el tiempo de exhibición de películas mexicanas, porque los distribuidores ven qué es lo que les conviene y qué les va dejar más dinero.

Al respecto, la senadora del PAN, Marcela Torres Peimbert, dijo que es fundamental apoyar la cinematografía nacional, porque México ha perdido su identidad y valores nacionales. Nos hemos convertido en una cultura aspiracional, porque queremos ser como nuestros vecinos del norte y negamos o rechazamos mucho de lo que implica la cultura mexicana.

A su juicio, el cine debe mostrar nuestros paisajes, idiomas indígenas, costumbres, lo bueno y lo malo que tenemos, que promueva nuestra cultura e identidad nacional, porque cuando nos dejamos de ver e identificar en el otro o en la otra dejamos de trabajar unidos por un objetivo común.

El también senador del PAN, Jorge Luis Preciado Rodríguez, resaltó que se requiere llevar a cabo este tipo de reuniones, a fin de legislar con la visión y experiencia de quienes integran esta industria.

Con ello coincidió el senador perredista Zoé Robledo Aburto, quien consideró que deberán recibir a todos los sectores que conforman la industria del cine en México.