Ordenará que se haga un estudio sobre el efecto de dicha modificación
Miércoles 14 de noviembre de 2012, p. 11
Ante la falta de consenso que generó entre los partidos políticos, y a pesar del respaldo entre consejeros, el Instituto Federal Electoral determinó retirar por ahora la pretensión de incluir entre los cambios a la credencial de elector el encriptamiento del domicilio del ciudadano. A cambio, se ordenará al Registro Federal de Electores (RFE) la realización de los estudios sobre el efecto de dicha modificación, lapso durante el cual se buscará la participación ciudadana.
Al término de la reunión de la Comisión del Registro Federal de Electores, la presidenta, Macarita Elizondo, dijo que se determinó que el tema ya no sea discutido durante la sesión del Consejo General, que se efectuará este mediodía –por falta de tiempo para incorporarlo en el orden del día–, y se pretende que el próximo viernes el mencionado órgano adopte el acuerdo para realizar el estudio.
Elizondo señaló que por lo pronto, para efectos de emitir la convocatoria para la licitación internacional que se requiere para elaborar la nueva credencial de elector, se incluirían las otras modificaciones, como la posibilidad de la lectura mecánica (similar a la que se utiliza para los pasaportes), la inclusión de la fecha de nacimiento en lugar de la edad, pero ésta se incluiría de forma encriptada, entre otras.
Factores en contra
El estudio que realizará el RFE –donde se pretende que haya participación ciudadana– incluiría, entre otros factores, el impacto que tendría en materia de seguridad del ciudadano el encriptamiento de los datos centrales de su dirección (calle, número interior y exterior) y que sólo sean explicitos datos como sección electoral, distrito, entidad y municipio.
Sin embargo, durante la sesión del Consejo General del IFE lo que habrá de concentrar el debate estará relacionado con la destrucción de las boletas.
Aunque el proyecto de dictamen que se presentará expresa que en acatamiento a la solicitud de suspender la destrucción de los materiales de 2006, dictada por el Comité de Derechos Humanos de la Organización de Naciones Unidas, se postergará este procedimiento, se espera que el PRD incorpore su propuesta de que se realice un estudio de comportamiento del voto y otros asociados a la capacitación de funcionarios de esos comicios.
A diferencia de las elecciones de 2003, 2009 y 2012, donde el IFE efectuó estudios diversos, sólo en los comicios de 2006 –paradojicamente los más polémicos– el Consejo General no aprobó ninguna disposición similar, por lo que ahora el PRD pretende que se realice, aprovechando la prórroga en el plazo de destrucción.
En otro orden, el IFE aprobará un acuerdo mediante el cual se determinará la pérdida de la vigencia de las credenciales denominadas 09 (que en el reverso tienen 00, 03, 06 y 09 para marcar que se ejerció el voto) y 12 (12, 03, 06 y 09), ya que, de acuerdo con la legislación electoral, ya no podrán ser utilizadas para los próximos comicios federales de 2015.
Mediante dicho acuerdo, el IFE pretende lanzar una campaña intensiva de sustitución de estas credenciales durante todo 2013, ya que perderán vigencia como forma de identificación oficial –al igual que se hizo en su momento con las credenciales 03– a partir del primero de enero de 2014. Será la última vez que ocurra esta disposición por parte del IFE, ya que que con la reforma electoral ahora la credencial de elector tiene una vigencia de 10 años.