El Senado demandó al gobierno federal incrementar el monto en mercancías que pueden introducir al país los mexicanos que regresan. A propuesta del PRI, solicitó que en el caso del Programa Paisano sean mil dólares o su equivalente en moneda nacional, y en periodos normales la franquicia sea de 300 a 500 dólares.

El priísta Jesús Casillas comentó que la medida tendrá un efecto favorable para los paisanos que pasan las fiestas navideñas en territorio nacional.

Dicha medida, refirió el senador, tendría un impacto favorable en la economía de los paisanos que ingresan mercancías adicionales a su equipaje, y además al considerar la cercanía de la aplicación del Programa Paisano, en el que gran número de connacionales vuelven a su tierra a festejar las fiestas de fin de año.

Detalló que el año pasado regresaron a México aproximadamente 800 mil paisanos para celebrar la temporada navideña con sus familiares, donde las mercancías que traen tienen como principal característica que no son destinadas a la comercialización, sino que se trata de regalos.

No obstante ello, explicó, son susceptibles de franquicia, de tal modo que al ingresar al país tienen derecho de pasar libre de gravamen fiscal o tributo de comercio exterior ciertos artículos como equipaje personal, y otros.

Por ello es necesario considerar que nuestros connacionales no solamente pagan impuestos por sus mercancías al ingresar a México, sino que se debe considerar que también deben pagar los impuestos aplicables en Estados Unidos.

Esto, refirió el legislador, es un impuesto que fluctúa, según percepciones, de 15 a 39.6 por ciento; además de los tributos estatales aplicables a las compras, los cuales van desde 6.5 a 10 por ciento del valor del bien y de acuerdo con la entidad de que se trate, los mexicanos contribuyen aquí y allá sin considerar que hacen llegar remesas a sus familias en este lado de la frontera, que también les implican un costo.

Refirió que la colaboración, que para la economía del país constituyen las remesas que envían los migrantes, los coloca como la tercera fuente de divisas, sólo después de las exportaciones petroleras y el turismo.

Las autoridades mexicanas, sostuvo Casilla, deben reconsiderar los montos de franquicia a las mercancías adicionales al equipaje, partiendo de dos premisas muy importantes: que la franquicia incrementada es exclusiva para mexicanos y que se refiere a mercancías no destinadas a la comercialización.