La ciudad de México sufre de un trato discriminatorio en comparación con las demás entidades del país al no tener facultades para decidir, entre otros aspectos, su techo de endeudamiento y a los responsables de la seguridad pública y procuración de justicia de su territorio, de allí que es necesario avanzar en una reforma política para que los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial del Distrito Federal tengan las mismas atribuciones que los demás estados de la República, coincidieron investigadores de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM).

Al señalar que el futuro de la gestión del jefe de Gobierno electo, Miguel Ángel Mancera Espinosa, depende en gran medida de que se concrete esta reforma, el maestro Manuel Larrosa Haro manifestó que el DF requiere de una constitución que incluya una visión metropolitana, que le de autonomía en materia financiera y en la que especifiquen las facultades de las autoridades locales y federales por ser la ciudad donde se asientan los poderes de la Unión.

Subrayó que posponerla sin razón alguna vulnera los derechos políticos de los habitantes en la ciudad de México, pues se debe reconocer que hay millones de personas que vienen y utilizan los servicios de la ciudad de México, que trabajan aquí, pero van a dormir a otras entidades, que utilizan el Metro y el Metrobús; es el reconocimiento de un aspecto federalista que ha sido vilipendiando, que ha sido puesto en un segundo nivel dijo.

Larrosa Haro consideró que hay una interpretación política que ha impedido que la reforma se concrete, pues el DF, desde los años 60, es políticamente opositor al PRI y en los años recientes al PAN, entonces pareciera un castigo político en relación a lo que aporta no sólo cultural y económicamente, y que tenga este trato desigual es un asunto francamente vergonzoso.

El politólogo Javier Santiago Casillo señaló que sin importar si se trata de una constitución o estatuto de gobierno, la reforma política debe ir encaminada a que las autoridades del DF tengan las mismas atribuciones que los poderes de gobierno de los demás estados de la República.

Sin embargo, dijo, aún hay aspectos que se deben resolver como por ejemplo determinar si las delegaciones políticas se convertirán en municipios, lo cual, añadió, es un tema muy complejo.