Las sierras La Giganta y Guadalupe, con extensión de 1.6 millones de hectáreas, que equivalen a 20 por ciento del territorio de Baja California Sur, forman una zona de tal riqueza de biodiversidad que cumple con todas las condiciones para constituirse en reserva de la biosfera, señaló Luis Fueyo, titular de la Comisión Nacional de Areas Naturales Protegidas (Conanp).

Durante la presentación del libro La Giganta y Guadalupe, con textos de Exequiel Ezcurra y Bruce Berger, y fotografías de Miguel Ángel de la Cueva, explicó que actualmente esa zona tiene amenazas ambientales y sociales, y los pobladores locales se sienten abandonados.

Se trata de poblaciones que viven con alto nivel de marginación, hay pocas actividades productivas y en el turismo que allí se puede impulsar deben participar los habitantes. Aquí, dijo, se requiere un área natural protegida; lo más adecuado es una reserva de la biosfera para impulsar un proyecto de conservación y desarrollo de sus habitantes.

Actualmente residen alrededor de 5 mil personas, dispersas en varias rancherías, en medio de una biodiversidad que incluye 64 especies de mamíferos, 12 de las cuales son endémicas, entre ellas el borrego cimarrón, la ardilla antílope y la zorra gris, además de 199 aves residentes como el tecolote occidental y el enano.

José Antonio Higuera, habitante de la comunidad Las Ánimas, en la sierra La Giganta, mencionó que la mayor preocupación en la zona es que cada año se acaban más recursos y falta lluvia, por lo que la gente abandona los ranchos. Explicó que desde hace dos años se trabaja en un proyecto de sustentabilidad en la región, pero se requieren caminos y centros de salud.