El clima de inseguridad que enfrenta el país en muchas zonas, si bien no está asociado directamente con  los procesos electorales, puede ser un factor que desincentive la participación ciudadana, reconoció el consejero presidente del Instituto Federal Electoral (IFE), Leonardo Valdés Zurita.

Sin embargo, sostuvo que la atracción que genera la renovación del Poder Ejecutivo y el hecho de que no sea una inseguridad general sino focalizada en algunas regiones y no estable, alentará la asistencia a las urnas en 2012.

Entrevistado en vísperas de que arranque el año electoral y con la incertidumbre sobre el nombramiento de los tres consejeros electorales faltantes en el instituto, Valdés admite que desde que se creó el IFE, 2006 ha sido el único año donde se generó un conflicto poselectoral, pero subraya que la reforma legal de 2007-2008 dotó al organismo de facultades para evitar que se rediten fenómenos que pusieron en riesgo la elección.

Llamado a concesionarios de radio y televisión

Derivado de la reforma, la regulación a los medios de comunicación electrónicos ha provocado diversos conflictos entre el IFE y los concesionarios de radio y televisión, sobre lo cual Valdés subraya, a pregunta expresa: Espero que los intereses de los concesionarios no pongan en riesgo la elección; que tengan elementos suficientes para entender que a México no le conviene poner en peligro el proceso, porque es un ingrediente de la vida democrática que debe evolucionar.

Agrega: Confío en que no pongamos en riesgo lo básico, que es la certeza de tener elecciones periódicas con respeto a los resultados, pues el escenario contrario no conviene a nadie, porque una crisis política no sólo afecta la democracia, sino también la vida económica, los mercados.

Entrevistado por La Jornada, Valdés Zurita se refiere a las discusiones sobre la designación de los tres consejeros electorales faltantes en un proceso que, para él, no ha fracasado ni está viciado por los plazos vencidos hace casi un año, pero no ha mostrado eficacia.

Sobre la eventual llegada al IFE como consejera de Arely Gómez, hermana de un alto funcionario de Televisa, Valdés dice confiar en que más allá de quienes finalmente puedan ser designados, el compromiso básico sea cumplir con el valor central del instituto: la imparcialidad. Sea quien sea debe haber ese compromiso en cada una de las decisiones, afirma.

Leonardo Valdés, durante la entrevista con La JornadaFoto Carlos Cisneros

Por otra parte, alude a la inseguridad: El dato alentador hasta hoy es que la violencia no está vinculada con el fenómeno electoral; no hay una situación de inseguridad derivada de las elecciones y los comicios locales se han podido realizar en términos generales, a pesar del clima de violencia.

Aunque la inseguridad va a ser el signo de estos comicios, Valdés sostiene que la violencia registrada en el país es un fenómeno dinámico, no es que la inseguridad se estacione en un solo lugar. Si bien en 2009 hubo un alto porcentaje de abstencionismo en algunas localidades con presencia del crimen organizado, como Ciudad Juárez, el consejero presidente del IFE lo asocia más a fenómenos sociológicos de desinterés por elecciones intermedias, que a la presencia del narcotráfico; por ejemplo, en Juárez se instalaron todas las casillas.

A pesar de ello, el Instituto Federal Electoral adopta ya previsiones de seguridad para su personal y para los ciudadanos que fungirán como funcionarios de casilla. Al convenio que tradicionalmente se firma con la Secretaría de la Defensa Nacional para salvaguardar la documentación electoral, se añadirá en esta ocasión otro acuerdo con la Secretaría de Gobernación para reforzar las medidas de seguridad para el proceso y los candidatos.

Los comicios de 2012 vienen precedidos por la polémica secuela poselectoral de 2006, donde para Valdés, el IFE realizó su trabajo técnico, aunque hubo algunos déficit en la conducción y especialmente en la comunicación de las acciones desarrolladas.

No obstante, el conjunto de reformas legales –destaca Valdés– dotaron al IFE de las facultades para conducir sin sobresaltos una elección, por cerrada que ésta sea; entre ellas menciona el mecanismo de recuento de votos en los supuestos de ley; las disposiciones para sancionar conductas que en su momento pusieron en riesgo la elección, como la injerencia de algunos medios de comunicación electrónicos, entre otros supuestos, podrán ser ahora detectados y sancionados por el instituto.