En décadas el gobierno fue una caja negra, nadie sabía qué sucedía
Miércoles 21 de septiembre de 2011, p. 15
Nueva York, 20 de septiembre. El presidente Felipe Calderón demandó transparencia a gobiernos estatales, así como a los otros poderes de la Federación, tras criticar la existencia de una caja negra
y graves problemas de corrupción en administraciones pasadas.
Al participar en el lanzamiento de la Asociación por un Gobierno Abierto, auspiciada por el presidente Barack Obama, aprovechó para insistir en sus críticas a gobiernos priístas –sin mencionar abiertamente al partido– y en sus exigencias de transparencia a otros niveles de gobierno y poderes, a menos de un año de las elecciones presidenciales.
En su segundo día de estancia en Estados Unidos, Calderón señaló que falta implementar mecanismos para la transparencia gubernamental en los niveles estatal y municipal, donde aún no se ha avanzado en la legislación ordinaria, y entrar en otras instituciones como es el Congreso de la Unión o el Poder Judicial.
Ante a Obama y la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, comenzó por decir que reconocía que “durante años, quizá décadas, el gobierno en México fue una caja negra, nadie sabía realmente qué sucedía dentro de ella y, como se podrán imaginar, eso generó gravísimos problemas de corrupción
, afirmó.
Sostuvo que en México, en su tránsito hacia la democracia, una de las demandas sociales más fuertes fue convertir esa caja negra
en una de cristal, para garantizar a cada mexicano el derecho a saber qué hace el gobierno y cómo lo hace.
En el hotel Waldorf Astoria –que estuvo cercado por un fuerte dispositivo de seguridad ante la presencia de Obama y sus invitados– el Presidente recordó que al principio de la década el Congreso de la Unión aprobó la reforma de acceso a la información, que permite conocer salarios y prestaciones de todos los servidores públicos, el monto de la nómina, el presupuesto asignado a cualquier programa gubernamental.
Refirió que en poco más de cuatro años, su gobierno ha recibido y atendido más de medio millón de solicitudes de información, y ha respondido a 98 por ciento de ellas.
Aseguró que ha entregado esa información convencido de que en una verdadera democracia el pueblo tiene derecho a saber lo que el gobierno hace.
En su discurso para contrastar lo ocurrido en el pasado y en la actualidad, insistió en que en su gobierno la transparencia y la apertura no son sólo parte de la Constitución, sino de sus principios éticos de comportamiento.
Aseveró que los programas están sujetos a un riguroso escrutinio ciudadano y legislativo, el cual se ejerce mediante un auditor superior independiente, electo por el Congreso, sin intervención del Presidente.
Al final se comprometió a cumplir un plan de acción con cuatro compromisos clave: aumentar la integridad pública, manejar más eficientemente los recursos públicos, aumentar la rendición de cuentas corporativas y mejorar los servicios públicos.
Además Calderón fue orador en un foro por el centenario de IBM, donde dio sus recetas de liderazgo
para solucionar los principales problemas del mundo.
En la mañana, el Presidente acudió personalmente a los estudios del canal de televisión CBS, para participar durante menos de 10 minutos en el programa The Early show.
Cuestionado con insistencia sobre la violencia en México, señaló que, según algunos, existe una paradoja mexicana
, pues se preguntan cómo es posible que un país con tal imagen de violencia registre crecimiento económico y tenga avances en salud y educación.
Después participó en la sesión inaugural de la Clinton Global Initiative 2011 con una breve exposición sobre cambio climático. Deploró que la crisis económica sea de tal envergadura que se haya restado atención al problema del cambio climático.