Miércoles 31 de agosto de 2011, p. 24
Washington. Los socorristas auxiliaban ayer a miles de estadunidenses aún aislados por las inundaciones, dos días tras el paso del huracán Irene, mientras el número de muertes llegó a 49 en la zona afectada. Según cifras oficiales, al menos 43 personas murieron en Estados Unidos (ocho en Nueva York, siete en Nueva Jersey y seis en Carolina del Norte). El meteoro mató a cinco personas en el Caribe antes de tocar Estados Unidos, y se le atribuye también otra muerte en Canadá. La secretaria de Seguridad Interior, Janet Napolitano, y su par de Agricultura, Tom Vilsack, visitaron Virginia y Carolina del Norte para evaluar los daños.