Indígenas que rechazan carretera inician negociaciones con el gobierno
Viernes 26 de agosto de 2011, p. 29
La Paz, 25 de agosto. El presidente boliviano, Evo Morales, anunció hoy que aprobará leyes en defensa de la naturaleza, a fin de despejar temores de algunos pueblos indígenas por daños al medio ambiente, y lamentó la actitud de quienes se oponen a la construcción de una carretera en la Amazonia.
Al mismo tiempo, las organizaciones indígenas que desde hace 10 días realizan una marcha en protesta por la construcción de esa carretera que pasará por el territorio indígena y parque nacional Isiboro Secure iniciaron conversaciones con el gobierno e hicieron una pausa en su protesta.
Al entregar recursos para la ejecución de obras de desarrollo en la localidad de Morochata, en Cochabamba, Morales precisó que promulgará una ley que impida más asentamientos irregulares en el territorio indígena.
Dijo que la zona por la que ingresaría la programada carretera abarca sólo 60 kilómetros, por lo que subrayó que algunos dirigentes de las etnias fueron engañados por organizaciones no gubernamentales que quieren privar a los bolivianos de desarrollo.
Recordó que esa carretera unirá a los departamentos de Cochabamba y Beni, una reivindicación centenaria, y que algunas de las demandas de los indígenas que se oponen a la construcción no tienen nada que ver con esa obra.
El gobernante indígena insistió en que hay intereses tanto nacionales como extranjeros para que Bolivia continúe sin recursos.
Por lo pronto, 300 organizaciones sociales respaldaron la construcción de la carretera que rechaza la Confederación de Pueblos Indígenas del Oriente Boliviano, que cuenta con el apoyo de unas 10 organizaciones y grupos que se presentan como defensores del medio ambiente.
Al comenzar las pláticas, la ministra de Desarrollo Productivo, Teresa Morales, manifestó su optimismo porque las etnias aceptaron escucharnos
, y precisó que se propuso a los dirigentes indígenas la instalación de seis mesas de diálogo con la participación de al menos seis ministros.
Unos mil 200 indígenas permanecen en la localidad de Puerto San Borja, unos 500 kilómetros al noreste de La Paz, donde se prevé que se desarrollen las conversaciones, a las que incluso se sumará el presidente Morales.
El líder de la confederación, Adolfo Chávez, advirtió que la movilización continuará si Morales no viaja a donde se encuentran los marchistas, que partieron de Trinidad, en el noreste, con la intención de recorrer 601 kilómetros para llegar en 35 días a La Paz y exigir respeto a su territorio, que consideran amenazado.