Las mujeres dirigen tres cuartas partes de los negocios micro
Miércoles 20 de julio de 2011, p. 44
De 2006 a la fecha el porcentaje de empresarias en el país se incrementó en menos de dos puntos al pasar de 17.7 a 19.1 por ciento, de acuerdo con las cifras más recientes del Instituto Nacional de Geografía y Estadística (Inegi).
Ello significa que menos de la quinta parte de los empleadores son mujeres, y de ellas tres de cada 10 son jefas de hogar.
Según el análisis del Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), realizado a partir de los datos más recientes disponibles de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo, el nivel de ingreso de las empresarias es más elevado que el de la población ocupada total de mujeres.
Sin embargo, en la comparación por sexo, las diferencias en el ingreso se mantienen tanto entre empleadores como en el resto de la población ocupada, ya que los hombres se encuentran representados en mayor porcentaje en el nivel de más de cinco salarios mínimos, en ambos casos.
Adicionalmente, es mayor el ingreso promedio por hora trabajada para varones que para ellas.
De acuerdo con el Diagnóstico sobre la situación de las empresarias, realizado por la Dirección de Desarrollo Sustentable del instituto, persisten los estereotipos y el machismo, sobre todo en los giros predominantemente masculinos, como son los sectores industrial y agropecuario, donde el porcentaje de empresarias es de apenas 13.1 y 2.7 por ciento, respectivamente, mientras 84.1 por ciento de las mujeres que emprenden un negocio lo hacen en el sector de comercio y servicios.
Entre los hallazgos destaca que las relaciones de género dificultan las interacciones en el ámbito empresarial.
Según las empresarias consultadas para la investigación, las negociaciones con hombres no prosperan por no tener pláticas machistas con ellos o porque no se acepta la corrupción. Como los puestos de decisión son de varones, no se tiene acceso a los cargos altos de las empresas para hacer negociaciones
.
Los datos estadísticos refieren que tres cuartas partes de las empresas lideradas por ellas son microempresas.
“La concentración de mujeres en las microempresas se atribuye a que estos negocios les representa pocas barreras en cuanto a requerimientos –escolaridad, requisitos legales o capital– y también a que su organización, por ser más flexible, les permite compatibilizar el trabajo extradoméstico con las responsabilidades domésticas que siguen a su cargo.”
Aída Cerda, subdirectora de Trabajo y Economía de Inmujeres, resaltó en entrevista que la conciliación de la vida familiar y personal con la laboral sigue siendo uno de los principales retos que enfrentan las emprendedoras, porque históricamente la sociedad ha asignado a las mujeres esas responsabilidades. Más de 90 por ciento de las mujeres hacen trabajo doméstico en su hogar independientemente de su estado civil, mientras el porcentaje de varones que lo hace es de 60 por ciento aproximadamente
, señaló.