Triunfo del líder de la ONG Memorial: HRW
Miércoles 15 de junio de 2011, p. 28
Moscú, 14 de junio. La jueza Karina Morozova, del distrito Jamovniki de esta capital, declinó este martes la demanda penal que presentó el presidente de Chechenia, Ramzan Kadyrov, contra Oleg Orlov, director de Memorial, organización no gubernamental (ONG) que defiende los derechos humanos en el Cáucaso del Norte.
Kadyrov se sintió calumniado por Orlov y quería que lo condenaran a tres años de cárcel, en tanto que la procuraduría rusa solicitó solamente el pago de 150 mil rublos (cerca de 5 mil dólares) como compensación por el supuesto perjuicio.
La mañana del 15 de julio de 2009, Natalia Estemirova, representante de la ONG Memorial en Grozny, fue secuestrada de su oficina en la capital chechena y, el mismo día, su cuerpo apareció a 100 metros de la carretera Kavkaz, ya en territorio de la vecina república de Ingushetia.
Estemirova, quien había dedicado los últimos 10 años de su vida a esclarecer secuestros y ejecuciones extrajudiciales perpetrados en Chechenia y otras repúblicas norcaucásicas, falleció del mismo modo, con disparos en la cabeza y en el pecho.
Orlov declaró entonces saber el nombre del responsable de ese crimen: Todos conocemos a este hombre. Se llama Ramzan Kadyrov y es presidente de Chechenia
.
Poco después abundó: Kadyrov ya había amenazado a Natalia, la había insultado, la consideraba su enemiga personal. No sabemos si él dio la orden o lo hizo algún allegado suyo para quedar bien con el jefe
.
Tras un alegato brillante de Guenri Reznik, abogado de Orlov, la jueza concluyó en su sentencia que el director de Memorial no tuvo premeditación de calumniar al presidente de Chechenia y únicamente manifestó una opinión, sin llegar a afirmar que Kadyrov participó personalmente en la organización del asesinato de Estemirova.
Es probable que Kadyrov recurra la sentencia, pero al margen de lo que pueda ocurrir en el futuro, la sociedad civil rusa tomó la absolución de Orlov como un triunfo que, señaló Tatiana Lokshina, de Human Rigths Watch (HRW), da esperanzas acerca de una verdadera mejoría de la situación judicial en Rusia
.
El propio Orlov se mostró feliz por constatar que todavía tenemos justicia
en Rusia y calificó la sentencia de un testimonio de que no será posible acallar la libertad de expresión
.
No hubo hoy declaraciones de Kadyrov ni de su entorno sobre el juicio en Moscú. El gobernante checheno, al parecer, tenía un asunto más importante que resolver para su imagen de líder de la nación: cesar abruptamente al holandés Rudd Gullit, a quien contrató con salario millonario como entrenador del Terek de Grozny.
Más que los malos resultados del equipo, que juega en la primera división de Rusia, una reciente entrevista de Gullit a un medio inglés provocó la ira de Kadyrov.
Gullit se quejaba de que ningún amigo quiere ir a visitarlo en Grozny, una ciudad donde no hay centros nocturnos y no se puede tomar una copa en ningún lado
. Reconoció también que dudó en aceptar la aventura chechena
, pero lo convencieron los millones que cobraría.
Por la rescisión de su contrato, Gullit tendría que recibir 8 millones 600 mil dólares. Si le pagan, el director técnico holandés habrá hecho el mejor negocio de su carrera deportiva, pero nadie puede dar garantías de que el agravio a los seguidores del Terek, cuyo presidente es el mismo Kadyrov, no tenga, dentro de algún tiempo, un cruento desenlace.