Para 5 millones 862 mil mexicanos que se estima ganan un salario mínimo al día, el fortalecimiento de su poder adquisitivo es tema aparte. Sólo les alcanza –en zonas urbanas– para cubrir poco más de 41 por ciento de los productos que integran el indicador conocido como canasta básica.

“Si consideramos que más de 16 millones de mexicanos tienen ingresos de entre uno y tres salarios mínimos –36 por ciento de la población económicamente activa (PEA) del país–, y eso representa el único ingreso de igual número de familias integradas por cuatro miembros cada una, tenemos a 64 millones de mexicanos sin posibilidades de cubrir los requerimientos mínimos de alimentación, vivienda, vestido, calzado, recreación, etcétera”, afirmó el presidente de la firma Consultores Internacionales, Julio A. Millán.

Señala que el costo mensual de la canasta básica –compuesta por 190 productos y servicios– es de 6 mil 730 pesos en las zonas urbanas. Esto representa que se requiere de un ingreso diario de al menos 224.33 pesos, y esto equivale a 3.75 veces el salario mínimo vigente en el Distrito Federal. Este monto, insiste, no lo obtienen más de 16 millones de mexicanos.

En tanto, especialistas del Centro de Análisis Multidisciplinario (CAM) de la Facultad de Economía de la UNAM calcularon que el precio de la canasta alimenticia recomendable pasó de 80.83 pesos a 156.76 entre diciembre de 2006 y abril de 2010, con un incremento acumulado de 93 por ciento tan sólo en el rubro de alimentos, sin tomar en cuenta el aumento en otros servicios, gas doméstico, renta, aseo personal y del hogar.

En el mismo periodo el minisalario se incrementó 17 por ciento, dicen los expertos Luis Lozano Arredondo, David Lozano Tovar, Mariana Juárez Martínez, Jaime Vázquez y María Guadalupe Zavala.

La caída en el poder adquisitivo durante el gobierno de Felipe Calderón es mayor a la sufrida en todo el sexenio de Miguel de la Madrid Hurtado y de Carlos Salinas de Gortari, afirmaron.