“Queremos saber más”
Nurío, Michoacán, 6 de marzo. Con una inusitada y bien recibida participación de jóvenes indígenas y no indígenas, y con delegados de los pueblos purhépecha, coca, triqui, nahua, ñhaatho’, n’an ncue, tzetal, ñañhu, ayuuk, tzotzil, binniza y wixárika, se celebró en la emblemática comunidad p’urhépecha de Nurío, la XXIX Reunión Ampliada de la Región Centro Pacífico del Congreso Nacional Indígena (CNI).
Diez años después de que la Marcha del Color de la Tierra llegó a la Meseta Purhépecha, para celebrar el histórico Tercer Congreso Nacional Indígena, los representantes de los pueblos debatieron sobre su caminar en la defensa y construcción de la autonomía y sobre los tropiezos que han tenido; analizaron el estadio actual de sus diferentes luchas y la participación de la mujer en la defensa de los derechos indígenas —un tema en que se reconocen avances y muchos pendientes.
Fue una reunión de análisis y balance del trabajo del cni, durante la que se mencionó que a pesar de que algunas personas y organizaciones que en otros momentos participaron en este proceso ahora ocupan un puesto en el gobierno o trabajan junto a las instituciones, se mantiene una organización que sigue luchando por la construcción de la autonomía.
“En la Universidad Pedagógica Nacional (UPN) casi no se habla de derechos indígenas, y cuando se hace, no se discute a profundidad. No tenemos mucha idea de cómo se hicieron los acuerdos (de San Andrés)”, manifestó un estudiante del pueblo ayuuk.
Por su parte, Alberto Alonso Galeano, de Guerrero, expresó: “Desconozco como ha estado funcionando este Congreso, pero sé que las comunidades indígenas siempre hemos sido marginadas y se nos ha dejado en el olvido, sin apoyo para poder crecer”.
Francisco Morales, de Ichán, Michoacán, señaló: “los estudiantes hemos hecho lo posible por conocer los Acuerdos de San Andrés, pero el gobierno y los partidos se dedican a cooptarnos con programas que sólo sirven para enajenar con ideas egoístas e individualistas. Queremos que los Acuerdos se difundan entre los estudiantes, queremos saber más”.
Los delegados reconocieron la importancia de la participación de los jóvenes, y coincidieron en que se está generando un espacio para que éstos tengan más participación dentro de las dinámicas del CNI.
“Como mujer es difícil participar, pero gracias al ejemplo que nos dio la comandanta Ramona a mí me quedó claro que era importante involucrarme en la lucha”, dijo Magdalena García Durán, ex-presa política mazahua, originaria del Edomex.
Rocío Moreno, coca de Mezcala, manifestó que “en la lucha de la liberación no sólo van los hombres o las mujeres, sino todos juntos. Las mujeres tenemos una fuerte presencia dentro de la comunidad, pues entendimos que la lucha es todos”.
En la declaratoria de esta asamblea, el CNI reconoció que “la dificultad y la derrota de todo movimiento tiene sus raíces en la exclusión de las mujeres y que los Acuerdos de San Andrés sólo son realizables con la participación de ellas”.
No obstante, al igual que en los otros puntos que se trataron, la intervención de las mujeres fue minoritaria, reflejo claro de que en esta materia aún falta mucho camino por andar.
Y en eso están.
En la reunión se ratificaron los Acuerdos de San Andrés como la Ley Suprema de los pueblos indios, a 15 años de haber sido firmados y se acordó realizar el siguiente encuentro en el territorio comunitario de la Región Costa Montaña de Guerrero.
Marcela Salas Cassani y Adrián Castro Bibriesca
