El Cairo, 25 de enero. Miles de egipcios, inspirados en la sublevación popular tunecina, salieron hoy a las calles en esta capital y otras ciudades del país exigiendo el fin de los más de 30 años de gobierno del presidente Hosni Mubarak, en protestas sin precedentes que terminaron en disturbios y dejaron dos manifestantes y un policía muertos y decenas de heridos.

¡Abajo, abajo, Hosni Mubarak!, coreaban los manifestantes en El Cairo, donde la policía utilizó gases lacrimógenos y chorros de agua y recibió como respuesta botellas y piedras. La policía no logró dispersarlos y sólo se replegaron en la plaza Tahrir, en donde se ubican la sede del gobierno, del Ministerio del Interior, del Poder Judicial y el Parlamento.

La televisión estatal informó que un oficial de seguridad murió cuando recibió una pedrada en la cabeza. En tanto, dos de los manifestantes murieron en otra protesta en la ciudad de Suez por el impacto de balas de goma, según fuentes médicas y de seguridad.

En cuanto a los heridos, cuatro eran policías y decenas más de manifestantes, además de que hubo al menos 14 detenidos.

La movilización respondió a una convocatoria que se venía haciendo desde hace más de una semana en Facebook, impulsada por el Movimiento 6 de Abril y otras organizaciones cercanas que pugnan por la democratización del país en una jornada de rebelión contra la tortura, la pobreza, la corrupción y el desempleo.

Se estima que sólo en El Cairo se manifestaron unos 15 mil personas, en su mayoría jóvenes, en reclamo de reformas políticas y sociales y al grito de revolución.

Al emular la rebelión de Túnez los manifestantes marcharon también hacia la sede del gobernante Partido Democrático Nacional coreando ¡Fuera Mubarak!, ¡Túnez es la solución!, ¡Mubarak márchate!, ¡Arabia Saudita no está lejos!, en alusión al país a donde huyó el derrocado tunecino Zine Abidine Ben Ali.

Las protestas se extendieron a ciudades como Ismailia, Suez, Alejandría, Mansura, Tanta, Mahala Kubra, las inmediaciones de Rafah o norte del Sinaí.

En todas se repitieron los reclamos de cambios, libertad, consignas como sistema asesino y de repudio a Mubarak y su hijo Gamal, del que se cree que está siendo preparado para suceder a su padre de 82 años.

El ministro del Interior, Habib Adli, afirmó que la policía es capaz de enfrentar toda amenaza contra la seguridad de la población y ordenó arrestar a cualquiera que exprese sus opiniones de manera ilegal, pero dijo que daba la bienvenida a protestas estacionarias y por tiempo limitado y que protegerá a los manifestantes.

Tenemos órdenes de no enfrentarnos con los manifestantes, dijo un responsable de seguridad que hablaba por teléfono.

Estados Unidos, cercano aliado de Egipto y gran donante de ayuda, pidió calma a todas las partes para evitar la violencia. Nuestra evaluación es que el gobierno egipcio es estable y está buscando maneras de responder a las necesidades e intereses legítimos del pueblo egipcio, dijo la secretaria de Estado Hillary Clinton.

En Egipto, con 80 millones de habitantes, más de 40 por ciento de la población vive con menos de dos dólares diarios por persona, según reportes de prensa.

Mientras, cientos de manifestantes en Túnez volvieron a protestar frente a la sede del gobierno de transición para exigir la dimisión de los representantes de la vieja guardia del depuesto Ben Ali.

Los manifestantes dispersaron a otro grupo que por primera vez salió en defensa del gobierno de unidad nacional, en tanto se informaba que el gabinete será remodelado este miércoles, a la par que un emisario estadunidense realizaba consultas en la capital.