Mientras los legisladores de la Comisión Permanente pidieron al gobierno federal aplicar las medidas necesarias para detener el creciente deterioro de los salarios mínimos, el secretario de Economía, Bruno Ferrari, cuestionó las reacciones de algunos sectores sociales que ya amagan con movilizarse por la carestía. A su vez, el secretario de Hacienda, Ernesto Cordero, dijo que la inflación de 0.17 por ciento durante la primera quincena de enero despeja el riesgo de subida de precios este año.

En su comparecencia ante legisladores, Ferrari aseguró que los reclamos por el deterioro del salario no tienen nada que ver con la realidad, cuando se habla, apuntó, de 0.17 por ciento de aumento de inflación. Aseguró que es increíble e irresponsable hacer de esto un asunto político.

Previo a la comparecencia, diputados y senadores habían avalado un punto de acuerdo, en el que ante el aumento en los precios de la canasta básica y de los energéticos pidieron a los secretarios de Hacienda, de Economía y del Trabajo, además de los titulares de la Comisión Federal de Competencia y de la Procuraduría Federal del Consumidor, aplicar las medidas necesarias para detener el creciente deterioro de los salarios mínimos.

En la comparecencia, Bruno Ferrari, quien acudió a San Lázaro citado para explicar algunas decisiones en materia regulatoria, se vio obligado a utilizar gran parte de su tiempo en defender la política económica del gobierno federal, y señaló que los incrementos en los precios de la canasta básica están influidos por factores ambientales e internacionales. No obstante, aclaró, el Ejecutivo busca reducir el incremento para que no afecte al bolsillo de los consumidores.

Indicó que los precios al consumidor en 2010 fueron más estables y menores a los que anticiparon los especialistas al comenzar el año, pues al cierre de 2010 fueron de 3.6 por ciento.

Desde París, el secretario de Hacienda, Ernesto Cordero, dijo que la inflación de 0.17 por ciento durante la primera quincena de enero es un nivel muy positivo y despeja el riesgo de subida de precios. Es muy buen dato. Es de las cifras más bajas de las últimas décadas, destacó.