Recuperó 2 terceras partes de lo calculado
Miércoles 26 de enero de 2011, p. 29
La Comisión Federal de Electricidad (CFE) obtuvo 2.3 millones de dólares como pago por daños, perjuicios e intereses devengados por sobornos que la empresa suiza ABB Inc. entregó a funcionarios de la paraestatal acusados de haber recibido alrededor de 1.9 millones de dólares, a cambio de obtener contratos por 81 millones de dólares.
La CFE dio a conocer el acuerdo alcanzado con la empresa proveedora en el marco de juicio civil ordinario 573/2010-B, ante el juzgado primero de distrito en materia civil. No obstante, el acuerdo deja vigentes todas las acciones penales que se realizan en contra de las empresas, sus ejecutivos y ex funcionarios.
Los recursos recuperados por medio del acuerdo con la empresa suiza representan apenas dos terceras partes del monto calculado originalmente de 2 millones 867 mil dólares. Versiones periodísticas señalan que sólo el ex director de Operación de la CFE, Néstor Moreno, habría sido sobornado con un yate con valor de 1.8 millones de dólares. Se presume que ABB entregó además un automóvil Ferrari valuado en casi 300 mil dólares y pagos diversos por 800 mil dólares.
En el caso de corrupción habrían participado al menos cuatro importantes funcionarios de la paraestatal, quienes ocuparon puestos estratégicos entre 2003 y 2004: Néstor Moreno Díaz, Jorge Hernández, Carlos Rovira Baker y Gustavo Santiago Torres, todos ya separados de la CFE.
El caso fue destapado en Estados Unidos a solicitud de ABB, y en 2009 comenzó el juicio. En octubre de 2010 la paraestatal informó que había presentado una demanda civil ante tribunales federales para exigir el pago de daños y perjuicios derivados de los sobornos entregados por ABB.
Néstor Moreno Díaz también habría estado cercano a un fraude por más de 308 millones de pesos contra las finanzas de la CFE, presuntamente cometido por uno de sus subordinados. El pasado 9 de octubre La Jornada publicó que el fraude fue detectado el 20 de junio de 2007 por la cajera de la paraestatal, María Elena Guerrero Escamilla, quien descubrió una transferencia ilegal de fondos por más de 7 millones de pesos a cuentas personales de empleados de la paraestatal. A partir de esa detección puso al descubierto que durante cuatro años se registraron acciones similares con operaciones que totalizaban 300 millones de pesos. Tras su descubrimiento la empleada fue detenida por la PGR, pues fue inculpada por declaraciones de un subordinado que dependía de Néstor Moreno.
Ayer la CFE informó que “recuperó 2.3 millones de dólares de la empresa ABB Inc. por concepto de los daños y perjuicios ocasionados por las cantidades presuntamente entregadas de manera indebida a ex funcionarios de la empresa.