La Procuraduría General de la República recibió hace un mes una denuncia de hechos presentada por el candidato a gobernador de la alianza Todos por Quintana Roo, Gregorio Sánchez Martínez, y por su esposa Niurka Sáliva, de origen cubano, en la que ambos aseguraban que el perredista había recibido llamadas telefónicas anónimas en las que se le exigía retirarse de la contienda electoral o de lo contrario podría ser apresado, confirmaron ayer fuentes de la dependencia federal.

La esposa del candidato a la gubernatura de Quintana Roo reveló ayer que esa denuncia también forma parte de una queja presentada ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).

Niurka Sáliva sostuvo en una entrevista radiofónica que Gregorio Sánchez Martínez es un hombre íntegro que siempre ha promovido la justicia y nunca ha ocultado nada.

Aseguró que a su esposo en ningún momento lo citaron en la PGR para que hiciera una declaración, pues el compromiso era que acudiera como testigo, pero cuando llegó a la procuraduría le quitaron sus teléfonos y quisieron obligarlo a declarar, a lo que él se negó y se reservó su derecho de hacerlo.

Recordó que ella y su esposo sufrimos dos atentados a balazos (en el estado de Quintana Roo) y después de que presentamos las denuncias, las autoridades nos salieron con que todo se trató de una broma.

Refirió finalmente que la aprehensión de su esposo se debe a que estamos tocando intereses políticos muy fuertes en el estado de Quintana Roo.