Doce personas, entre ellas el alcalde de Guadalupe y Calvo y tres agentes ministeriales, fueron asesinadas ayer en Chihuahua, al tiempo que autoridades, empresarios y organizaciones civiles discutían en Ciudad Juárez cómo enfrentar la crisis de seguridad que padece la entidad.

Alrededor de las 19:45 horas, Ramón Mendívil Sotelo, presidente municipal de Guadalupe y Calvo, y su escolta fueron atacados por un grupo armado en el kilómetro 10 de la carretera Cuauhtémoc-Chihuahua.

La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) informó que el edil regresaba de sostener reuniones de trabajo en la capital del estado, cuando al menos seis pistoleros abrieron fuego en su contra desde una camioneta.

El funcionario y su guardaespaldas intentaron huir, pero los tiros provocaron que este último perdiera el control del vehículo en que viajaban, el cual se impactó contra el auto de una familia, cuyos integrantes resultaron lesionados.

Horas antes, en la comunidad de Baborigame, también en Guadalupe y Calvo, un comando mató a tres elementos de la policía ministerial investigadora, perteneciente a la PGJE, cuyos nombres no fueron proporcionados. Los uniformados realizaban trabajos de investigación.

Cinco personas más fueron ejecutadas a balazos en la fronteriza Ciudad Juárez y otras dos en los municipios de Guadalupe Distrito Bravo y Ojinaga.

Tres ataques de grupos armados contra corporaciones y elementos policiacos de Durango, dejaron un saldo de cinco uniformados muertos y tres heridos; otras dos personas fueron ejecutadas en la entidad.

La noche del martes, un grupo armado disparó por más de 20 minutos contra la comandancia del municipio de El Mezquital, que alberga un cuartel de la agencia estatal de investigación (AEI).

Dos elementos de esta última corporación, identificados como José Trinidad Cabral y José García Reséndiz, perdieron la vida.

Minutos después, antes de la medianoche, otro grupo atacó el edificio de la policía municipal de Vicente Guerrero. Allí falleció el agente José Guadalupe Martínez y resultaron heridos Rodrigo Luévanos y Pedro Leyva.

Cerca de las cinco de la mañana de este miércoles, una camioneta de la AEI fue baleada por un comando en la capital del estado. Murió un policía y otro quedó lesionado. No fueron reveladas sus identidades.

Una hora más tarde, también en la capital, fue encontrado el cadáver de un elemento de la AEI amarrado a un árbol y con las manos amputadas.

Finalmente, por la tarde, los hermanos Lorenzo Antonio y Rosa Isela Rosales Olivas fueron ejecutados a balazos en el barrio de Tierra Blanca, de la ciudad de Durango. Ambos se dedicaban a la venta de frutas y verduras.

Luego del asesinato de cuatro elementos de la AEI y un agente municipal en menos de 12 horas, unos 150 efectivos de esa corporación, perteneciente a la PGJE, suspendieron labores durante la mañana para exigir garantías de seguridad para ellos y sus familias.

Demandaron equipo adecuado para cumplir con su labor y aumento a la mísera cantidad de 120 mil pesos de su seguro de vida, que es una vergüenza.

Además de las 19 homicidios perpetrados en Chihuahua y Durango, el crimen organizado mató a 11 personas en Sinaloa, Sonora y el estado de México, con un total de 30 homicidios.

En el municipio de Petatlán, Guerrero, hubo un enfrentamiento entre militares y presuntos sicarios. Uno de los pistoleros pereció y dos más fueron detenidos.

En Culiacán, Sinaloa, efectivos de la Armada catearon una de las viviendas de familiares de Ismael Zambada García, El Mayo.

Rosario Niebla, ex esposa de Zambada y quien administra junto con sus hijos ranchos y la empresa lechera Santa Mónica, acusó a los uniformados de llevarse fotografías y documentos, así como de destruir puertas y muebles.

Junto con Joaquín El Chapo Guzmán, Zambada lidera una de las organizaciones más poderosos del narcotráfico.

En un operativo policiaco realizado en el puerto de Ensenada, Baja California, fueron detenidos 11 integrantes del cártel de los Arellano Félix y se incautaron 250 mil dólares.

Rubén Villalpando, Javier Valdez, Javier Salinas, Ulises Gutiérrez, Sergio Ocampo, Antonio Heras, corresponsalía en Durango y Notimex