Luego de su favorable recuperación, el futbolista Salvador Cabañas comenzó a probar alimentos vía oral, informó Alfonso Díaz, jefe de los servicios médicos del América.

El especialista, quien ha estado al pendiente del jugador paraguayo, señaló que se mantiene estable, perfectamente consciente y platicando en forma normal con su familia. No hay más novedades.

Explicó que está con grandes deseos de recuperarse por completo: Está muy animado, tiene muchas ganas de salir pronto del problema y cuando salga de esto habrá tiempo para que (los reporteros) conversen con él.

Díaz indicó que existe plena confianza en que Cabañas mantenga su estabilidad en cuanto a los signos vitales. No ha escapado de la zona difícil, aún la situación es de riesgo, pero como va, podemos ser muy optimistas.

Interrogado sobre si ya se podrá saber qué secuelas tendría el sudamericano, el galeno explicó que todavía no es posible, sino hasta que salga de terapia intensiva y sea trasladado a una habitación normal para que le realicen más exámenes.

No se puede hacer una valoración mientras esté en cuidados intensivo, por ahora sería muy fatigoso revisarlo, pero él tiene movilidad en las cuatro extremidades, concluyó.

Cabañas, quien la víspera recobró la conciencia después de que le retiraron los sedantes –aunque su cerebro continúa inflamado–, será evaluado temprano este lunes por el neurocirujano Ernesto Martínez Duhart, quien dará una conferencia de prensa a las 8:30 horas en el auditorio del hospital Ángeles del Pedregal.

En Asunción, dirigentes deportivos y cientos de feligreses participaron en una misa para pedir a la Virgen de Caacupé por la pronta recuperación del seleccionado.

El presidente de la Asociación Paraguaya de Futbol, Juan Ángel Napout, llevó hasta el lugar la camiseta albirroja número 10 del delantero.

El dirigente viajará a la ciudad de México con el director técnico del representativo paraguayo, Gerardo Tata Martino, para acompañar a Cabañas en su proceso de recuperación.

La celebración religiosa se llevó a cabo en la explanada principal del santuario, en la que cientos de aficionados se dieron cita para pedir por la salud del goleador.