El gran problema que impide a la ciudad de México lograr niveles de bienestar social propios de un país desarrollado se halla en sus altos niveles de desigualdad.

Tiene un ingreso per cápita superior al de España, 27 mil dólares contra 23 mil del país ibérico, y si fuera un país sería la cuarta economía de América Latina, pero su estructura distributiva es similar a la de un país centroamericano, aseveró el director del Consejo de Evaluación del Desarrollo Social del Distrito Federal (Evalúa-DF), Pablo Yanes Rizo.

Al participar en el Seminario Permanente sobre la Igualdad, que realiza cada viernes la Secretaría de Desarrollo Social como parte de las acciones para conmemorar el Bicentenario de la Independencia y el Centenario de la Revolución, el titular del organismo público descentralizado aseveró que en materia de política social, el Distrito Federal está en fase de institucionalización mediante leyes, reglamentos y mecanismos en el que hay más programas con derechos y más derechos con recursos.

Lo anterior, apuntó, es lo que hace la diferencia con la política social del gobierno federal, que si bien tiene múltiples programas, no ha avanzado hacia la institucionalización de derechos.

Agregó que es momento de dar el salto y enfrentar los grandes desafíos de la política social, con el fin de no sólo compensar desigualdades, sino revertirlas.

Es necesario pasar de programas focalizados a políticas universales, tema que se discute en la Comisión Económica para América Latina y el Caribe.